La nutricionista de Nueva Clínica Cordillera, Camila Sembler, se refirió a la importancia de la hidratación en nuestra dieta. Además, entregó una serie de recomendaciones para favorecer una adecuada ingesta de agua durante esta temporada.
22 de junio de 2021.- A raíz del reciente gesto del reconocido futbolista Cristiano Ronaldo durante una conferencia de prensa, en la que desplazó bebidas de fantasía y las reemplazó por una botella de agua, la promoción de su consumo para el cuidado de nuestra salud se ha puesto nuevamente en el centro de la discusión, un aspecto que en Chile cobra especial relevancia dado que el 81,2% de los chilenos consumen bebidas azucaradas.
La nutricionista de Nueva Clínica Cordillera, Camila Sembler, se refirió a esta situación y manifestó que más allá de las especulaciones respecto a la motivación del futbolista “es interesante que sea mediático, ya que, al ser un referente, sobre todo para muchos niños, esto podría generar un aumento en el consumo de agua y una disminución en el de bebidas, lo que propicia más y mejores hábitos saludables a largo plazo”.
Sembler explicó que, en Chile, “9 de cada 10 niños consumen bebidas azucaradas diariamente”, lo que corresponde a alrededor de 450 ml diario, y que “sólo el 20% consume 4 o más vasos de agua al día”, lo que aumenta el riesgo de obesidad y sobrepeso, mayor incidencia de diabetes tipo 2, riesgo de síndrome metabólico y resistencia a la insulina y estimula la acumulación de grasa en el hígado.
Por otra parte, la profesional destacó que instituciones como la OMS, recomiendan beber 2 litros al día en mujeres adultas y 2.5 litros al día en hombres, bajo condiciones normales de actividad y temperatura. De dicha cantidad, se indica que “el 80% sea por ingesta directa de agua y un 20% a través del agua de los alimentos”.
BENEFICIOS Y RECOMENDACIONES PARA UNA CORRECTA HIDRATACIÓN
La especialista en nutrición afirmó que una adecuada hidratación, se relacionan con un aumento en la capacidad de concentración y memoria, punto de especial importancia durante las extensas horas de trabajo o estudio. Además, asegura que beber agua constantemente “ayuda a regular la presión arterial y la circulación sanguínea, además para transportar hidratos de carbono, proteínas, vitaminas, minerales y oxígeno a las células” favoreciendo la generación de la energía necesaria para un buen funcionamiento del organismo.
En relación a lo anterior, la profesional de Nueva Clínica Cordillera sostuvo que “el agua es fundamental en la digestión de los alimentos y absorción de nutrientes en el sistema gastrointestinal” y que una correcta hidratación “es esencial para el adecuado funcionamiento del riñón y las vías urinarias” y agregó que esto también se relaciona con la prevención de las infecciones del tracto urinario y disminuye el riesgo de formación de cálculos renales.
La profesional manifestó, respecto a los tipos de agua, que “aquella conocida como de la llave” responde a los estándares de la OMS, dado que “está sometida a procesos que garantizan que los minerales presentes en el agua no generan daño a la salud” y detalló que en caso del agua purificada, “es sometida a procesos de destilación que eliminan casi en su totalidad todo tipo de minerales, microorganismos y residuos, y su consumo se recomienda para pacientes con problemas hepáticos, hipertensos y enfermos renales, porque está libre de sodio”
Para favorecer un consumo adecuado y frecuente de agua, la nutricionista de Nueva Clínica Cordillera entregó una serie de recomendaciones para mantenerse hidratados, en beneficio del correcto funcionamiento de nuestro organismo:
- Al levantarse, iniciar el día tomando un vaso de agua fría o tibia.
- Se pueden adicionar saborizantes naturales al agua, tales como limón, pepino o naranjas y edulcorantes no calóricos como estevia o sucralosa para mejorar su sabor.
- Mantener una botella o taza en el lugar de trabajo o estudio para consumir agua de manera constante.
- Beber agua de manera previa a la realización de actividad física y mientras se ejercita el cuerpo, se debe tomar un sorbo cada 15 o 20 minutos. Al finalizar también se debe consumir agua para rehidratarse.
- Evitar el consumo de bebidas que contengan cafeína o alcohol, dado su efecto deshidratante, y no sustituyen o complementan la ingesta de agua.
- Para lograr la ingesta recomendada de 2 litros de agua al día, idealmente beber 1 litro de agua de la llave o purificado, y el otro litro restante, beber líquidos como té, infusiones de hierbas, agua de cocción de frutas, leche, entre otros.
- Aumentar el consumo de alimentos compuestos por un alto porcentaje de agua, como lechuga, tomate, pepino, espinacas, apio, sandía, melón y piña.
Finalmente, la nutricionista de Nueva Clínica Cordillera, Camila Sembler, recomendó “beber agua sin sentir sed”, dado que, al presentar este síntoma, “ya se ha iniciado el proceso de deshidratación, por lo que se recomienda tomar sorbos pequeños durante todo el día o 300 cc cada 2 horas”
Fuente: Consiglieri