Hoy día 28 de agosto de 2019, se ha conocido la resolución del fallo dividido del Tribunal Calificador de Elecciones (TRICEL) referido a la apelación al fallo de primera instancia del Tribunal Electoral Regional (TER). Como es sabido por la comunidad universitaria, éste había declarado inválida la elección de rector de la Universidad de Santiago de Chile, realizada el año 2018, y en la que resultó reelecto por cuarta vez consecutiva Juan Zolezzi.
El fallo de mayoría del día de hoy revocó la resolución del TER. El fondo de la resolución que valida jurídicamente el actual mandato del rector Zolezzi, se sustenta en que en nuestra universidad, sigue vigente el Decreto Fuerza de Ley N°149, impuesto en 1981 por la dictadura civil-militar encabezada por el general Augusto Pinochet. A pesar que se reconoce la vigencia de la ley N° 21.094, vigente desde el 5 de junio de 2018, que establece un reconocimiento universal del derecho a voto en la elección de Rector a todas las y los funcionarios que desempeñan labores académicas en forma regular y continua, la existencia de un artículo transitorio, permite que el DFL N° 149 siga en vigencia hasta que la universidad no valide su propio estatuto orgánico. De esta forma, el fallo del TRICEL señala que jurídicamente, los y las profesoras por horas de clases no tienen la categoría de académicos y, por lo tanto, carecen de derechos políticos.
Ante esta resolución, declaramos que respetamos este fallo, pero para nosotros carece totalmente de legitimidad democrática. Por este motivo, el principal legado que deja esta batalla jurídica, es que pone en el centro de gravedad de la lucha por una USACh democrática y participativa, la aprobación de un Estatuto Orgánico que democratice nuestra convivencia universitaria.
En segundo lugar, este fallo establece que el actual mandato del rector Zolezzi carece de legitimidad democrática, pues solamente se sostiene en base a la institucionalidad creada por la dictadura civil-militar. Es una vergüenza para la USACh y el país, que a casi a 30 años de terminada la dictadura de Pinochet, su sombra esté más presente que nunca y nada menos que representada en la figura del rector de la USACh.
Destacamos el voto de minoría de Jorge Dahm que afirma:
“ … es la función la que define al académico tal como lo señala el artículo 28 del Estatuto Orgánico y no la manera de cómo ha sido contratado o su jornada laboral. DE esta manera los académicos contratados por horas de clases tienen la calidad de académicos en razón de las labores que desempeñan.”
Y concluye observando que:
“llama la atención que la propia Universidad de Santiagio, que tiene una planta de aproximadamente de un 50% de académicos denominados profesores por hora, para efectos electorales los desconoce, pero para los efectos de la ley 20.129 sobre sistema nacional de aseguramiento de la calidad de la educación, si los considera para poder acreditarse como una institución de calidad.”
Finalmente, llamamos a la Comunidad Universitaria a informarse, discutir y participar. El actual proceso de elaboración del nuevo Estatuto Orgánico de la universidad, se constituye en la gran oportunidad histórica para terminar, de una vez por todas, con las prácticas antidemocráticas que se han naturalizado en la vida interna de la USACh. Este proceso debe ser acompañado por una movilización triestamental que promueva y garantice los avances democratizadores de nuestra universidad.
Asociación de Académicos de la Universidad de Santiago
Coordinación de Profesores por Horas de Clases de la Universidad de Santiago