- Ministra de Vivienda y Urbanismo, Paulina Saball, inauguró este viernes los nuevos conjuntos habitacionales para 124 familias de Ñuñoa y comunas aledañas, destacando que el proceso de reconstrucción de viviendas sociales se haya logrado en una comuna donde el valor del suelo urbano es más alto.
- “Valoramos extraordinariamente que este proceso de reconstrucción permita que las familias recuperen el lugar que tenían, en una comuna dotada de todos los servicios”, afirmó.
Santiago, 13 de marzo de 2015.- Las villas Canadá y Salvador Cruz Gana, emblemáticas por su carácter patrimonial en Ñuñoa y la Región Metropolitana, presentan una nueva cara desde este viernes al ser inaugurados por la ministra de Vivienda y Urbanismo (Minvu), Paulina Saball, los seis conjuntos habitacionales reconstruidos para 124 familias que en su mayoría se vieron afectadas por los efectos del terremoto del 27 de febrero de 2010.
Junto a autoridades comunales y regionales, la titular del Minvu visitó los nuevos inmuebles que se construyeron en el mismo lugar donde se encontraban anteriormente, permitiéndoles a las familias mantener sus redes y la cercanía a servicios locales. “Valoramos extraordinariamente que este proceso de reconstrucción, aunque se haya tardado, permita que las familias recuperen el lugar que tenían en una comuna que está dotada de todos los servicios, conexión y un barrio como éste”, afirmó.
Sobre este mismo tema, la ministra Saball recalcó que con estos proyectos “hemos logrado que la construcción de viviendas de interés social se ejecute en comunas acomodadas, donde el valor del suelo es más alto. Tenemos un gran desafío en Chile de recuperar la oportunidad que las viviendas con subsidios del Estado se puedan construir en aquellas comunas denominadas ricas”.
Tanto la Villa Canadá como la Villa Salvador Cruz Gana retratan de manera importante el fenómeno de la reconstrucción por el terremoto del 27 de febrero de 2010, en el centro y sur del país. Ambos proyectos surgieron en 2011, pero desde esa fecha hasta enero de 2014 experimentaron dos quiebras, hasta que una tercera empresa constructora logró terminar el proyecto.
“La urgencia para sacar adelante este proyecto tenía mucho que ver con esta deuda con las familias que han visto absolutamente trastocadas sus vidas durante este tiempo”, remarcó la ministra.
Cabe señalar que se trata de viviendas de calidad para 124 familias, en las cuales predomina una gran cantidad de adultos mayores (48%) que hasta hoy no tenían un lugar para vivir tranquilos. Son viviendas en edificios de cuatro pisos, con dos departamentos por piso, los cuales tienen dos y tres dormitorios. Cada uno con una superficie entre 56 y 61 metros cuadrados.
Fuente: Ministerio de Vivienda y Urbanismo.