Se elaboró una encuesta en español y creole, la cual fue difundida entre diversos colectivos migrantes internacionales y la red asistencial. En total participaron 1690 migrantes internacionales.
Un estudio realizado por el Programa de Estudios Sociales en Salud del Instituto de Ciencias e Innovación en Medicina (ICIM) la Universidad del Desarrollo (UDD), con la colaboración del Servicio Jesuita a Migrantes, la Comisión de Migración y Salud del Colegio Médico, el Núcleo Milenio de Resistencia Antimicrobiana MICROB-R y la Red de Investigación Interdisciplinaria en Enfermedades Infecciosas, reveló que los migrantes no se sienten preparados para enfrentar la pandemia.
Su objetivo fue explorar el grado de conocimiento de poblaciones migrantes internacionales residentes en Chile sobre Covid-19, sus medidas de prevención, cuáles son las necesidades más urgentes reportadas por estas poblaciones y cómo perciben la información que hoy se difunde sobre el tema desde la autoridad.
Para este fin, se elaboró una encuesta online en español y creole, que fue difundida entre diversos colectivos migrantes internacionales y la red asistencial, la que luego de ser difundida por tres semanas (entre el 4 y el 24 de abril).
“En total encuestamos a 1690 migrantes internacionales. Entre los resultados encontramos que el 61% considera no sentirse preparado para enfrentar la pandemia; el 33% declara que la información no es comprensible y, uno de cada tres personas, dice no saber dónde ir en caso de requerir asistencia médica. Además, uno de cada cuatro migrantes siente que no recibe información suficiente (25%); mientras que nueve de cada diez señalan estar angustiados y preocupados”, sostuvo Báltica Cabieses, directora del Programa de Estudios Sociales en Salud de la UDD.
Uno de cada cuatro participantes no considera estar recibiendo información suficiente, y uno de cada tres considera que la información no es comprensible. El 61% declara no sentirse preparado para enfrentar esta pandemia y uno de cada tres migrantes internacionales participantes en la encuesta señalan no saber dónde ir en caso de requerir asistencia médica.
El proyecto surge de la motivación de generar nueva información para el enfrentamiento del virus SARS-Cov2, contribuyendo al trabajo de la autoridad y de los profesionales y trabajadores de salud en todo el territorio nacional. A su vez, se espera que la información obtenida permita generar mejoras y nuevas soluciones a esta crisis sanitaria, aportando al bienestar y a la integración de personas extranjeras en nuestro país.
En este contexto, Báltica Cabieses agrega que “no todos los migrantes internacionales que residen en Chile son vulnerables, pero aquellos que lo son viven en condiciones no solo de pobreza como los nacionales, sino también de exclusión, estigma y discriminación”. Tal y como lo señala la Red de Naciones Unidas para la Migración en un comunicado oficial, existe el riesgo de que estas adversidades se exacerben, como resultado de las medidas de contención y de la xenofobia latente en la búsqueda de chivos expiatorios. Hay que reconocerlos como parte de la solución, como miembros de las comunidades y como trabajadores de primera línea en el suministro de alimentos, transporte, cuidados y otros servicios.
José Tomás Vicuña SJ, Director Nacional del Servicio Jesuita a Migrantes, institución que colaboró en el estudio, señaló “nadie se enferma por su nacionalidad, sino por múltiples otros factores. Este estudio busca indagar en cómo afecta a la población migrante el contexto que vivimos. Desde el SJM hemos visto cientos de personas migrantes que no han sido infectadas por el Coronavirus, pero si afectadas por sus consecuencias. Teniendo conocimiento de las problemáticas que arrojó el estudio, es que desde el Servicio Jesuita a Migrantes elaboramos un protocolo de atención con perspectiva intercultural para el acompañamiento a estas comunidades”.
Sobre la encuesta y sus resultados
El promedio de edad de personas que respondieron la encuesta fue de 38,17 años y, el 67% de la muestra, fue de sexo femenino. A su vez, se identificaron 35 países distintos de origen de los participantes, siendo los principales Venezuela, Colombia, Haití y Perú. La mayoría de ellos llegó a Chile entre 1 y 5 años atrás y reside en la Región Metropolitana.
Los encuestados identifican el coronavirus como el microorganismo causante de Covid-19 y un 84,5 reconoce que la transmisión es por vía área. Además, destacan como principales dimensiones de desconocimiento que la vía sexual es un mecanismo de transmisión relevante y que se puede propagar por el viento a grandes distancias.
En cuanto a su estado de salud, 22 participantes indicaron haber tenido fiebre mayor a 38,5 C° y dificultad respiratoria (al mismo tiempo) en los últimos 30 días. Por otra parte, un 22% de los encuestados señaló no estar realizando cuarentena al momento de la entrevista.
Acerca de la información que manejan sobre Covid-19, uno de cada cuatro participantes considera que no es suficiente, uno de cada tres, que no es comprensible y, uno de cada cuatro considera que ha recibido información de mala o muy mala calidad acerca de la enfermedad.
En tanto, un 61% declara no sentirse preparado para enfrentar la pandemia, sumado a que uno de cada tres migrantes internacionales señalan no saber dónde ir en caso de requerir atención médica. Además, nueve de cada 10 reportan sentirse angustiados o preocupados, y siete de cada 10 tristes o deprimidos a causa de la pandemia.
La salud mental de migrantes internacionales es un tema urgente en este momento. De acuerdo con esta encuesta, nueve de cada 10 reportan sentirse angustiados o preocupados, y siete de cada 10 tristes o deprimidos a causa de la pandemia.
Sobre qué les preocupa de su futuro en Chile luego del Covid-19, destacan la situación del país, su economía individual, el tema la laboral, las condiciones de vida, salud, educación, situación migratoria y relación con el país de origen. Sobre qué necesitan para sentirse tranquilos, señalan el acceso a información, los ámbitos político, de salud, laboral, económico y social a nivel nacional, condiciones de vida del individuo y del hogar, condición de migrante y tema emocional y espiritual.
Fuente: Servicio Jesuita a Migrantes