- Las probabilidades de contraer enfermedades cardíacas aumentan con la edad. Sin embargo, los antecedentes familiares son un factor importante.
En Chile, se producen más de 100.000 hospitalizaciones al año por enfermedades cardíacas, siendo también una de las principales causas de muerte. Por esta razón, la prevención es clave y acudir al cardiólogo se hace vital, sobre todo si presentan algunos síntomas de alerta.
“Se debe hacer un chequeo médico constante después de los 35 años si se está dentro de algún grupo de riesgo, un familiar directo ha tenido un infarto antes de los 50 años o para evaluación cardiovascular previa a realizar actividad deportiva; y desde los 40 años, y cada 5 años, si se tiene buena salud”, destaca el jefe de la Unidad de Cardiología de de Clínica INDISA, Dr. Nilo Carvajal.
Algunos de los síntomas a los que hay que poner atención
- Dolor torácico, en extremidades, mandíbula o espalda.
- Dificultad para respirar, cansancio y limitación para hacer cosas habituales, como caminar o vestirse.
- Palpitación acelerada, que podría dar cuenta de arritmia.
- Los desmayos indican, en algunos casos, una disfunción eléctrica del corazón
“Aunque se sientan algunos de estos síntomas de manera ligera, se debe acudir al cardiólogo para tener una revisión médica exhaustiva y así poder detectar a tiempo cualquier patología que se esté desarrollando”, señala el Dr. Carvajal.
Factores de riesgo
Las probabilidades de contraer enfermedades cardíacas aumentan con la edad. Sin embargo, los antecedentes familiares son un factor importante. “Si una persona joven tiene padres con infartos antes de los 60 años, tendrá un mayor riesgo”, comenta el jefe de la Unidad de Cardiología de Clínica INDISA.
Otros factores de riesgo relevantes son el tabaquismo, diabetes, hipertensión arterial, obesidad, colesterol alto, sedentarismo, una dieta inadecuada y estrés.
Enfermedades más comunes
Según el especialista de INDISA, el infarto de origen coronario es el más prevalente dentro de las patologías cardiovasculares y el de mayor incidencia en la población. Le siguen los síndromes coronarios de insuficiencia cardíaca y arritmias.
- Infarto de origen coronario o miocardio: se caracteriza por la muerte de una porción del músculo cardíaco producida por la obstrucción completa de una arteria coronaria. Ante esto, el aporte sanguíneo se suprime. “El mayor riesgo es el tiempo que carece de oxígeno el músculo cardíaco, ya que si es durante un tiempo prolongado (90 min – 120 min), el tejido de esa zona muere y no se regenera, provocando consecuencias físicas y motoras severas e incluso la muerte”, menciona el cardiólogo de Clínica INDISA.
- Insuficiencia cardíaca: es una enfermedad crónica y degenerativa del corazón que impide que este pueda bombear sangre de manera eficiente y poder hacer llegar suficiente oxígeno y nutrientes a los otros órganos. Puede presentarse a cualquier edad, pero las probabilidades aumentan con el transcurso de los años. No es posible revertir la patología, pero sí hay tratamientos que pueden mejorar los signos y síntomas de esta.
- Arritmias cardíacas: son una alteración del ritmo cardíaco, provocando que el corazón lata demasiado rápido (taquicardia), demasiado lento (bradicardia) o de manera irregular. Generalmente, las arritmias cardíacas dan la sensación de tener un aleteo en el pecho o de corazón acelerado. Algunas de estas son inofensivas y otras mortales. Además, existen tratamientos para controlarlas o eliminar estos latidos alterados. Las arritmias cardíacas empeoran o se producen, en su mayoría, por un corazón dañado.
“Todas estas enfermedades se pueden prevenir o tener un mejor diagnóstico si se mejoran los hábitos de vida. Es de suma importancia adoptar un estilo de vida saludable, donde la actividad física y la alimentación equilibrada sean fundamentales en la rutina de todas las personas, independiente de su edad”, finaliza el Dr. Nilo Carvajal.
Finalmente, Clínica INDISA cuenta con una Unidad de Cardiología que reúne a médicos altamente especializados y dispuestos a resolver los diversos problemas cardiovasculares que puedan presentar los pacientes, tanto en sus aspectos preventivos y de diagnóstico como en las etapas de curación y de rehabilitación.
Fuente: Extend.