El primer grupo rendirá la Prueba de Transición Universitaria entre este lunes y mañana martes. Jueves y viernes será turno del segundo grupo. La jefa de la Unidad de Promoción de la Salud Psicológica del Departamento de Calidad de Vida Estudiantil de la Usach, Beatriz Painepán, entrega diversos conceptos claves.
Este lunes 6 de diciembre, más de 275 mil postulantes comenzaron a rendir la Prueba de Transición Universitaria (PDT). Se trata del primer grupo, quienes entre hoy y mañana deberán responder diversas preguntas en las pruebas de Comprensión Lectora, Ciencias, Matemáticas e Historia. Luego será el turno del grupo 2 el próximo jueves 9 y viernes 10 de diciembre.
Para la psicóloga y jefa de la Unidad de Promoción de la Salud Psicológica del Departamento de Calidad de Vida Estudiantil de la Usach, Beatriz Painepán, es clave darle relevancia al proceso de autocuidado como preparación de esta prueba importante.
“Quizás uno de los aprendizajes que nos está trayendo la pandemia es la importancia de incluir el autocuidado personal como una materia que estaba pendiente, y entendido como bienestar físico, emocional, social y espiritual. Hay que aprender a cuidar y a cuidarse como una práctica cotidiana y de responsabilidad personal. En este sentido la prueba es una experiencia importante, pero no queda exenta de incluir estos aprendizajes nuevos sobre el cuidado personal”, sostuvo.
Pensando en los días que vienen para el grupo 2, entregó ciertos consejos. “Es importante recalcar ciertas aristas claves al momento de dar esta prueba. En primer lugar, en aquellas personas que cuando se enfrentan a una situación muy relevante lo niegan, donde prefieren no pensar hasta que inminentemente afronte la situación. Acá la idea es encontrar y sugerir que las personas lo piensen antes y se preparen personalmente, que prevean”.
“Es acá donde se hace importante el autocuidado. Como la comodidad física, desde pensar en lo que voy a vestir, que sea cómodo, holgado, fresco si hace calor o con la posibilidad de abrigarse si hace frío. Cualquier inquietud o preocupación que perturbe o los mantiene preocupados, solucionarlo antes o dejarlo (para abordarlo, enfrentarlo y solucionarlo después). Estos días hay que bajar las revoluciones y estar más tranquilo”, señaló.
Al momento de dar la prueba
En esta arista, entregó los siguientes puntos: “En términos muy prácticos, cuando se rinden las pruebas siempre la sugerencia es abordar lo que una maneja más fácil primero, se puede responder de forma espontánea con mayor seguridad y lo que se vea más complejo, en vez de verse estampado en esto, hay que saltarlo y dejarlo marcado, y volver después de eso, pero no quedarse en lo que genera dificultad ya que aumenta la sensación de desconfianza, inseguridad y bloqueo emocional. La clave es simplificarse la vida”.
“También es relevante considerar que esto es un proceso importante pero no lo más importante de la vida, ya que todo tiene arreglo, hay que pensarlo de ese modo más que una situación definitiva para el resto de la vida. Darle la importante como lo más fundamental del mundo, sabiendo que se puede dar de nuevo y están en el camino de buscar la vocación, no es lo ideal”, finalizó.
Fuente: USACH