Para nadie es un secreto que estamos atravesando un periodo de transformación digital del cual todos somos partícipes. Los nuevos hábitos de consumo han obligado a las grandes corporaciones a hacer de sus servicios una experiencia personalizada para cada uno de sus clientes y la Inteligencia Artificial (AI), es crucial en este proceso.
En este sentido, la industria logística ya no debe satisfacer solamente la demanda del mercado global, sino que debe atender la exigencia de la inmediatez en las entregas. Para obtenerlo, es necesario implementar un servicio que sea flexible y se acomode a los requerimientos del cliente, sin mencionar, que se debe estar un paso adelante si se quiere ser un referente en el mercado.
Hoy en día, el uso de la Inteligencia Artificial en el transporte y las entregas de Última Milla, es indiscutible, puesto que, la mayoría de las empresas, en especial los e-Commerce, hacen uso de estos datos para proporcionarle a los usuarios ofertas especiales, un remarketing eficiente o el obsequio del envío por la compra de sus productos.
Por otra parte, la AI aplicada en logística, optimiza y crea rutas inteligentes, coordinando recursos y viajes de forma más eficiente y rentable. También establece una omnicanalidad dentro de la compañía, automatiza y acelera los procesos de producción y almacenamiento y genera un análisis predictivo en el mercado.
Indudablemente, la tecnología está transformando la forma de ver el mundo, entre más fácil y práctico sea el proceso, mayor será la rentabilidad para el negocio. Claro está, que, en un principio, se deberá hacer una inversión acorde a lo que la compañía desea a mediano o largo plazo, pero los resultados estarán asegurados bajo una predicción de la Inteligencia Artificial, así que, solo queda decidir si el futuro es ahora.
Claudio Paredes
Country Manager, Quick Chile
Fuente: AllPress