- Este tipo de aire acondicionado permite hasta hoy suministrar aire de confort al público de manera confiable y económica en fábricas, teatros, tiendas, restaurantes, instalaciones deportivas y hospitales, entre muchos otros.
23 de mayo de 2022.- Ayer, 22 de mayo de 2022, Carrier celebró el centenario de la invención de la máquina de refrigeración centrífuga (o “chillers”) que, en muchos sentidos, hizo posible el mundo moderno. Básicamente es un tipo de aire acondicionado que se utiliza en las grandes industrias.
La concepción de Carrier de combinar un compresor de refrigeración centrífugo con una carcasa, un nuevo tipo de condensador y un enfriador en un solo marco, mejoró el enfriamiento del proceso en las fábricas de todo el mundo.
“Son equipos de gran envergadura, donde las capacidades térmicas parten desde los 500 TR normalmente usados en instalaciones de gran tamaño como aeropuertos, edificios de gran tamaño y centros comerciales donde los consumos de energía representan un 40% del costo de operación de estas edificaciones. Cuentan con compresores centrífugos que permiten manejar condiciones de presión de temperaturas más elevadas y dan como resultado mayor eficiencia y menores consumos energéticos por metro cuadrado”, destaca el project product manager en Midea Carrier Chile, Ronel Hernández.
La primera instalación de este tipo de aire acondicionado fue en una fábrica de chocolate de Filadelfia en 1923, y se trató de tres enfriadores centrífugos. Poco tiempo después, esta tecnología se implementó también en los fabricantes de rayón en la India y en las fábricas de galletas saladas en México.
En 1924, Carrier hizo realidad su sueño de refrigeración de confort cuando los propietarios de una tienda por departamentos de Detroit agregaron enfriadores centrífugos. La tecnología centrífuga suministró aire de confort al público de manera confiable y económica en teatros, tiendas, restaurantes, instalaciones deportivas, barcos, hospitales y edificios de oficinas.
Una década más tarde, la refrigeración centrífuga había llevado el aire de proceso a más de 200 industrias. La producción de alimentos se volvió más segura, los hospitales eran más cómodos e higiénicos y se hicieron posibles nuevos medicamentos que salvan vidas, como la penicilina. Ahora, incluso ayuda a la preservación de las vacunas para el Covid-19.
Pero eso no es todo. Al proporcionar temperatura y humedad precisas, la tecnología de enfriadores centrífugos también ha ayudado a la infraestructura de la era digital moderna, como la electrónica de todo tipo, chips semiconductores, centros de datos y robótica. Todo esto no sería posible sin la invención de Willis Carrier.
Innovación constante
Pese a que en términos generales, la física fundamental de la tecnología centrífuga no ha cambiado en estos últimos 100 años, Carrier ha seguido innovando para impulsar nuevos avances tecnológicos en los enfriadores centrífugos.
En la actualidad, los chillers centrífugos Carrier son las unidades más eficientes del mercado debido a su tecnología, la cual incluye variadores de frecuencia en los compresores centrífugos, además de intercambiadores del tipo inundados lo cuales permiten efectuar labores de mantenimiento más eficientes. “Son altamente confiables, casi nunca fallan, a diferencia de equipos comerciales convencionales”, asegura Hernández.
Un ejemplo de esto son las enfriadoras AquaForce® Vision 30KAV de Carrier, que están presentes en el mercado chileno. Estas unidades cuentan con inteligencia Greenspeed®, que es la tecnología detrás de los ventiladores, bombas y compresores de velocidad variable, lo cual permite una mayor eficiencia y un rendimiento optimizado. Este tipo de enfriadores son la solución perfecta para aplicaciones comerciales e industriales, en las que los instaladores, consultores y propietarios de los edificios exigen una fiabilidad superior y un rendimiento óptimo, especialmente a carga parcial.
Son unidades Tornillo con compresores doble tornillo inverter de imán permanente, lo que hace que los tiempos de vida de estos equipos sean más prolongados. Por otro lado, la unidad cuenta con intercambiadores de calor tubo carcaza del tipo inundado. Esto posibilita un rendimiento excepcional y bajos niveles de ruido. Además, son amigables con el medioambiente, ya que utilizan el refrigerante HFO R-1234ze que ofrece un potencial de calentamiento atmosférico (PCA) inferior a 1, similar al de sustancias naturales, y con una menor huella total de carbono, 10% menor a otros refrigerantes como el HFC R-134a y a mezclas HFC como R-513A.
En Chile, los enfriadores centrífugos están presentes, por ejemplo, en la Planta Térmica T1, en el aeropuerto Arturo Merino Benítez; en el Hospital Militar, en La Reina, y en el Mall Portal Temuco.
Para más información sobre la historia del enfriador centrífugo visita carrier.com/100.
Fuente: Extend.