Entre las principales características de esta tecnología destaca su alta capacidad y selectividad de remoción, además de no agregar componentes tóxicos en el proceso de purificación.
En el norte del país se ha captado una necesidad de tratamiento de agua para sistemas de riego, sistemas hidropónicos y otros ligados cultivos agrícolas, debido a que la calidad del agua en su estado natural posee altos niveles de metaloides y metales pesados, obteniéndose productividades más bajas en los cultivos, como resultado de esto el remover estos componentes indeseados se ha transformado en una necesidad crítica.
Justamente para abordar esta problemática, investigadores de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV) en conjunto con la empresa GENERA han desarrollado un sistema de remoción de metales pesados basado en biomasa de microalgas.
El profesor Rolando Chamy explicó que esta tecnología “está basada en las propiedades fisicoquímicas de biomasa microalgal y su aplicación para acondicionamiento de agua de riego en sistemas tecnificados ha sido probado con buenos resultados, así como también en hidroponías y sistemas cerrados de cultivo. La base de la tecnología es física y su aplicación e instalación es posible realizarla con elementos estándar de sistemas de adsorción e intercambio iónico convencionales”.
Esta solución tecnológica, que fue presentada en el IV Sunset de Innovación, organizado por la PUCV, UV y USM, puede ser empleada por empresas de agrocultivos, plantas de acondicionamiento de agua para distintos fines, y por pequeños agricultores.
Chamy resaltó que “el proceso de remoción es muy rápido, llegando al equilibrio en un tiempo muy reducido, lo cual es bueno si se piensa en un sistema de remoción continuo, este tendrá una tasa de remoción más alta, esto es finalmente un elemento de potencialidad para la tecnología”.
Por otra parte, el investigador Robinson Soto explicó que “al contactar el efluente con la biomasa microalgal mediante equipos convencionales de tratamiento de agua, y considerando un diseño que provea el área de contacto suficiente, tomará lugar una remoción de metales de eficiencia robusta. Es importante considerar que esta tecnología no agrega componentes tóxicos y es totalmente amigable con el medio ambiente”.
Fuente: PUCV.