Las organizaciones sociales, ambientales y productivas de las comunas de Penco, Talcahuano, Tomé y Bulnes, ante la inexplicable ampliación de la suspensión de la tramitación de los proyectos, tanto del Terminal de Regasificación, como de la Central Termoeléctrica “El Campesino”, señalamos a la opinión pública de la región y del país, lo siguiente:
1.- Que la empresa BIOBIO GENERA está tramitando, en forma separada, desde el mes de noviembre del año 2014, ante el SEA de la Región del Biobío dos proyectos íntima e indisolublemente vinculados entre sí: una Central Termoeléctrica que pretende construirse en medio de la zona agrícola de la Comuna de Bulnes y un Terminal de Regasificación que busca emplazarse en las costas de Penco y Lirquén.
2.- Que ambos proyectos fueron objeto de numerosas observaciones ambientales por parte de diversos servicios públicos sectoriales. Además, la ciudadanía y las comunidades que se verán directamente afectadas por estos proyectos presentaron centenares de objeciones oponiéndose fundadamente a estos y con esos antecedentes el SEA de la región elaboró un Informe Consolidado para cada uno de los proyecto, en que solicitó al titular aclarar y rectificar sus deficiencias.
4.- Que respecto de ambos proyectos, BIOBIO GENERA solicitó una ampliación del plazo para responder hasta el 30 de octubre de 2015 y el SEIA como autoridad ambiental aceptó la solicitud, dejando en evidencia una actitud inexplicablemente condescendiente con los intereses del titular.
6.- En efecto, el plazo de 120 días que establece la ley para que un proyecto sea tramitado y resuelto -ampliable hasta 180 días- tiene como objeto acotar la incertidumbre sobre la aprobación o no del mismo, respecto de todos los intervinientes del proceso y no solo del titular de éste. En el caso concreto, la autoridad sabe, que son muchas las organizaciones sociales, ambientales y económicas que están condicionadas por la decisión que se tome.
7.- En definitiva, cuando el titular presente su primera ADENDA (30 de octubre de 2015) ya habrá transcurrido casi un año de tramitación, tiempo en que todos los opositores a estos proyectos, seguiremos en la incertidumbre sobre lo que sucederá en el entorno en que vivimos y trabajamos, aspecto que la autoridad ambiental no consideró cuando autorizó la ampliación del plazo, dejando en evidencia con ello que los Estudios de Impacto Ambiental son tan deficientes, que requieren de más de seis meses, para intentar responder los fundados y legítimos cuestionamientos ciudadanos.
9.- No cabe duda que con estas suspensiones, la empresa titular de los proyectos busca agotar la activa oposición que las organizaciones sociales y vecinos de ambas comunas hemos venido ejerciendo durante meses. Aprovechando este periodo de suspensión para la realización de lobby con organizaciones y sindicatos, lobby en el cual la empresa miente y ofrece dinero de forma descarada.
10.- Por otra parte, se debe tener en cuenta también que esta suspensión infundada de la tramitación de los proyectos, deja sin respuesta la exigencia de la Asociación Indígena Koñintu Lafken-Mapu sobre la pertinencia que se cumpla el Convenio N°169 de la OIT en cuanto a desarrollar la correspondiente Consulta Indígena.
11.- Frente a estas maniobras dilatorias de la empresa titular y de la actitud complaciente del SEA, reiteramos nuestra más absoluta oposición a estos proyectos, y advertimos que no cejaremos en nuestra lucha por proteger y preservar nuestro patrimonio ambiental, y proteger la salud de quienes desde hace décadas vivimos en Penco, Lirquén, Talcahuano, Bulnes y en general nuestra región del Biobío.
Coordinadora Penco-Lirquén
Coordinadora Chorera
Coordinadora Tomecina
Comité Bulnes Sin Termoeléctricas