Desde su fundación, la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV) ha estado estrechamente ligada al desarrollo de la región y el país. Y el mejor ejemplo de esto es su vínculo con la Corporación La Matriz, que ha permitido entregar una cooperación permanente para iniciativas que van en directo beneficio del Barrio Puerto. Con esta alianza, ambas instituciones han buscado contribuir a la transformación social del Barrio Puerto, a través de actividades de desarrollo territorial desde distintos pilares: niñez, interculturalidad, asistencia comunitaria y medio ambiente.
Es mediante el lazo entre la PUCV y la Corporación que han surgido una variedad de iniciativas, tales como el Consultorio Jurídico Pro Bono La Matriz, de la Escuela de Derecho, proyecto Amor al Barrio Puerto contribuye al rescate y valorización de la identidad local de vecinos y vecinas del sector y la Escuela de verano Sostenible, proyecto de la Escuela de Arquitectura y Diseño, algunas intervenciones por parte del Centro de Estudios Oftalmológicos en el sector del Barrio Puerto, junto a estudiantes y profesores de Tecnología Médica PUCV, entre otras.
Respecto del proyecto CUVIC, integrantes de la Escuela de Periodismo desarrollaron un trabajo territorial para fortalecer la comunicación barrial entre las organizaciones y vecinos del Barrio Puerto. Estos esfuerzos se traducen en “Amor al Barrio Puerto”, un trabajo comunitario que, hace ya dos años, contribuye al rescate y valorización de la identidad local para aportar a la reducción de desigualdades simbólicas y estigmatización que pueden vivir estos territorios y sus comunidades.
Respecto de “Amor al Barrio Puerto”, Daniela Lazcano, directora de CUVIC, comentó que este trabajo junto a vecinas y vecinos se trata de “una experiencia interesante de vinculación con el medio, porque es una iniciativa que se desarrolla a partir de sus propias inquietudes. Llegamos convocados a través de CUVIC, para realizar un proyecto comunicacional y periodístico, pero el cómo se le da forma nace del diálogo permanente con vecinos y vecinas”.
Al ser ya un trabajo permanente en el territorio desde hace dos años, “da muestra de un trabajo sostenible y sostenido en el tiempo, entre la Universidad y el territorio”, destacó Lazcano.
Otra iniciativa destacada ha sido el Consultorio Jurídico Pro Bono, que ofrece orientación y representación jurídica a personas del Barrio Puerto, comuna de Valparaíso y Viña del Mar. Aracelli Caballería, abogada que trabaja junto a estudiantes de la Escuela de Derecho en este proyecto, afirmó que el Consultorio ha permitido “acercarnos a usuarios de un territorio concreto, donde personas que viven en un determinado lugar cuenten con asesoría jurídica gratuita, y que puedan acceder a ella de forma simple”.
Además, comentó, “los usuarios llegan principalmente mediante recomendaciones de personas que han sido asistidas”, lo que da cuenta del impecable trabajo realizado hacia la comunidad.
Vicente Acchiardo, estudiante de quinto año en Derecho PUCV, es pasante del Consultorio Jurídico Pro Bono y expresó que lo más sorprendente en su experiencia ha sido “lo cruda que puede ser la realidad de estas personas y cómo esta necesita una intervención de profesionales como nosotros para poder ayudarlos y asesorarlos sobre cómo actuar en algunos casos. Para mí, esa ha sido la experiencia y obviamente me ha gustado bastante”.
Sin duda, la colaboración constante de ambas instituciones en este tipo de proyectos dejan patente que el foco principal es la transformación social de Valparaíso desde la interdisciplinariedad, algo fundamental para dar respuesta a las necesidades y desafíos de las personas en Valparaíso de la mejor manera.
Fuente: Pontificia Universidad Católica de Valparaíso.