Director regional de Gendarmería destacó que la educación es una de las principales herramientas para alcanzar la reinserción social.
A partir del 30 de marzo comienzan las clases en los doce establecimientos educacionales que funcionan en los centros penitenciarios de la región. Este año un total de 1985 personas privadas de libertad, tanto hombres como mujeres, se encuentran nivelando sus estudios. Es decir, uno de cada tres reclusos estudia al interior de las unidades de Gendarmería.
Del total de alumnos cerca de 600 se encuentran cursando cuarto medio. De ellos, 396 ya se anotaron para dar la Prueba de Selección Universitaria (PSU) a fines del mes de noviembre y próximamente comenzarán a prepararse para así poder emular a Gonzalo, ex interno del Complejo Penitenciario de Valparaíso, quien, el año 2013, alcanzó un destacado puntaje, pudiendo matricularse en la carrera de Pedagogía en Historia y Geografía de la Universidad de Playa Ancha.
Consultado respecto a la elevada cantidad de internos inscritos, el director regional de Gendarmería, coronel Eduardo Muñoz, sostuvo que: “Más que cifra es una manifestación de las personas que están en un proceso de reinserción, a través de la educación, y que desean seguir avanzando y darle un vuelco a sus vidas. La educación, finalmente, es una de las herramientas más importantes para la movilidad social”.
Paulina Manque, coordinadora educacional de la dirección regional de Gendarmería, detalló que el proceso de inscripción comienza en el mes de junio y que el coordinador local analiza si el recluso cumple con los requisitos para poder inscribirse. En caso de ser así procede a anotarlo en el sitio de internet del Departamento de Evaluación, Medición y Registro Educacional (Demre) de la Universidad de Chile.
El año pasado en total fueron 223 los internos que cursaron este examen en alguna unidad penal de la región, representando el 17,5 por ciento del total de reclusos que dieron la Prueba en el país.
Fuente: Gendarmería, Dirección Regional de Valparaíso.