- Durante su Visita de Estado a México dictó una cátedra magistral sobre género, oportunidad en que destacó las diversas medidas impulsadas en Chile, que apuntan a empoderar, proteger y asegurar los derechos de las mujeres.
A 40 años de la Primera Conferencia Mundial sobre la Mujer, que tuvo lugar en Ciudad de México, la Presidenta de la República, Michelle Bachelet, dictó una conferencia magistral de género en el marco de la Visita de Estado que realiza a la nación norteamericana. “Me complace estar hoy con ustedes, conversando e intercambiando ideas y experiencias sobre un tema que ha estado, por largo tiempo, en el centro de mis preocupaciones y al que he tratado de contribuir desde distintos ámbitos: la lucha por la equidad de género, por la inclusión y participación de las mujeres en todos los ámbitos de la vida social”, afirmó.
La máxima autoridad nacional recordó que “ese acontecimiento marcó un hito en el camino recorrido por la comunidad internacional en la toma de conciencia sobre la necesidad de trabajar, de manera efectiva y seria, para lograr la igualdad de derechos entre hombres y mujeres, y para cerrar las enormes brechas de género existentes”, al tiempo que valoró la labor abnegada de mujeres notables de nuestro continente: “Rita Cetina, Hermila Galindo, Elvia Carrillo y Frida Kahlo, entre muchas otras, que abrieron ventanas y puertas, derribaron murallas, y sentaron las bases del futuro igualitario con el que hoy podemos soñar y que esperamos legar a nuestras nietas y nietos”.
Al posicionarse en el contexto actual, señaló que “hoy tenemos al menos tres certezas con relación al estatus actual de la mujer en mi país y en el mundo. La primera es que hemos conseguido, especialmente en las últimas décadas, importantes avances en la lucha por la igualdad. La segunda es que tenemos aún muchas tareas pendientes, todas urgentes. Y la tercera es que el desarrollo equitativo e inclusivo que anhelamos para nuestros países sólo se logra con igualdad de género”, sentenció.
En este escenario, añadió que “la búsqueda de equidad, de relaciones equitativas y justas entre hombres y mujeres, debe ser una prioridad de los Estados alrededor del mundo y particularmente de los latinoamericanos. Porque esta es una premisa ética -un deber moral, un simple acto de justicia- y también una condición práctica para el progreso económico y humano de nuestros pueblos”.
Con respecto a Chile, señaló que, al igual que Costa Rica, Guatemala y Nicaragua, nuestro país tipificó como “femicidio” el asesinato de mujeres en determinadas circunstancias y amplió las penas aplicables a este delito.
“Más recientemente, hemos impulsado e implementado una serie de políticas que apuntan a empoderar, proteger y asegurar los derechos de las mujeres. Por ejemplo, una de las primeras y más importantes medidas que adoptamos al asumir la Presidencia el año pasado, fue enviar al Congreso el Proyecto de Ley que crea el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género, con el fin de fortalecer la institucionalidad requerida para promover y garantizar los derechos de todas mis compatriotas”, detalló la Mandataria.
Por otro lado, con el objetivo de garantizar principios tan básicos como el derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad, explicó que “estamos duplicando las Casas de Acogida, que dan cobijo a las víctimas de la violencia -que en mi país provoca alrededor de 40 femicidios al año-, y aumentaremos en un 25% los Centros de la Mujer que entregan apoyo y asistencia oportuna a quienes la necesitan”.
Junto con ello, enfatizó que “estamos implementando diversas políticas que fortalecerán la autonomía económica de las mujeres lo que es, sin duda, esencial para disminuir su vulnerabilidad frente a los abusos y la violencia”.
Al finalizar su discurso, subrayó que “hemos dado importantes pasos en la lucha por la equidad de género. Gracias al legado de nuestras precursoras, nuestras próceres y a nuestros propios esfuerzos, hoy podemos soñar con un futuro promisorio que antes nos estaba vedado. Pero aún tenemos mucho por hacer, si queremos alcanzar esa promesa. Debemos seguir trabajando por reducir las brechas de género, en todos los ámbitos; por limitar y erradicar la violencia; por derribar las barreras culturales e institucionales que nos limitan; por ampliar y asegurar nuestros derechos; por acceder a espacios de poder y por ‘abrir nuevas ventanas a las esperanzas de los pueblos’, como decía Amanda Labarca”.
Fuente: Dirección de Prensa, Presidencia de la República.