- En conjunto la Orquesta Andina, la Orquesta de Cámara y el cantautor nacional interpretaron un repertorio de artistas chilenos como Víctor Jara y Quilapayún.
- 500 personas asistieron a la jornada realizada en la Casa Central de la universidad.
Alrededor de 500 personas participaron en el concierto de la Orquesta de Cámara PUCV, la Orquesta Andina PUCV y el cantante nacional Nano Stern, en el contexto del programa de conmemoración de los 50 años del golpe de Estado y el quiebre democrático, realizado por la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV).
Los asistentes -niños, adolescentes y público general- participaron de una convocatoria abierta durante la tarde el viernes en el gimnasio de la Casa Central de la Universidad.
El espectáculo, que se enmarca dentro del programa “50 años del golpe y el quiebre democrático en Chile; reflexiones sobre el presente y el futuro”, estuvo cargado de mensajes a través de la música llamando a recordar el pasado para construir el futuro del país, mediante un repertorio enmarcado en el nuevo canto popular chileno.
El primer número estuvo a cargo de la Orquesta Andina que inició la jornada al ritmo de la zampoña para luego interpretar “La Charagua” y “La Partida”, ambos temas de Víctor Jara, más adelante y tras la ovación del público brindaron el tema “Aire de Nostalgia” de Andrés Márquez y cerraron su presentación con “Niño Mudo” de Quilapayún.
Nicolás Moreno percusionista, marimbista y director (s) de la orquesta indicó que “esta fecha es muy importante para los músicos que cultivamos el folclor popular de tradición, considerando que el charango y la quena fueron instrumentos por algunos años prohibidos y ahora ya son parte de nuestra tradición y gozan de la misma importancia cultural que otros”.
Para el segundo acto del concierto, hizo ingreso al espacio la Orquesta de Cámara con una versión acústica del tema “Vamos Mujer” de la banda folclórica Quilapayún, luego interpretaron “El Cigarrito” y “El Derecho de Vivir en Paz” de Victor Jara y finalizaron con el clásico porteño “La Joya del Pacífico”.
Su director, Jesús Rodríguez, comentó que la importancia de su participación en la jornada radica en que “la música siempre se ha hecho parte de los procesos sociales. Nosotros no nos podemos quedar al margen y con nuestros instrumentos queremos llevar el mensaje respecto que lo que estamos conmemorando no se puede repetir nunca más”.
El cantante nacional Nano Stern dio cierre a la jornada con “El Arado” de Víctor Jara y dedicó el show a Luis Iribarren, el hijo adoptivo de Víctor Jara. Stern interpretó “Manifiesto”, “Te Recuerdo Amanda”, “Aún creo en la Belleza” y “Agua Clara”, esta última pieza de su autoría.
“Todos los ciudadanos y ciudadanas tenemos un rol que cumplir porque esto se trata de conmemorar nuestra historia colectiva, aquella que nos hace pertenecer a una Nación, a un país, a un grupo de gente que tiene una historia en común y heridas tan dolorosas como las que se conmemoran hoy no pueden pasar desapercibidas, no puede pretenderse dar vuelta a la página más aún cuando no hay ni verdad, ni justicia ni reparación, que son los tres elementos necesarios para que el país pudiese sanar”, dijo el músico.
Tras el concierto los asistentes compartieron sus impresiones. Para Arturo Levicán “todo estuvo muy emocionante, la música y las canciones que eligieron. El mejor momento fue cuando estuvieron juntos las dos orquestas y Nano Stern, no solamente por los temas sino la emotividad que tuvo el momento”. La opinión fue compartida por Claudia Di Girolamo del Mauro, quien opinó que “claramente la presentación de Nano Stern fue muy emocionante, también las dos orquestas de la PUCV. Estuvieron maravillosas”.
Fabián Villalobos fue el músico a cargo de realizar los arreglos de los temas interpretados. “Se trató de una bonita selección, representativa de parte de la música nacional, especialmente relativa a la nueva música chilena, que en términos políticos tiene mucho sentido. Es muy bonito que se hayan unido las dos orquestas de la PUCV, es una gran instancia que abre la Universidad Católica de Valparaíso”. Por su parte Julia Escuti, ex funcionaria de la PUCV, dijo estar “muy emocionada. Fue una tarde realmente maravillosa, siempre muy necesaria en este tiempo. Hubo un mensaje valioso de esperanza y el sentir que la gente participa de esta presentación fue precioso. Fue tremendamente emotivo, me voy feliz a casa”.
Fuente: PUCV.