La tarde de este miércoles se dio a conocer la Resolución de Calificación Ambiental del proyecto Los Bronces Integrado (LBI) en un contexto que, la Fundación Greenpeace, rechaza por el impacto ambiental y por la forma en la que Anglo American obtuvo los permisos.
Cabe recordar que este proyecto fue inicialmente rechazado por la instancia técnica, el Servicio de Evaluación Ambiental, en mayo de 2022, por no cumplir con los estándares que exige este tipo de operaciones y por el riesgo que suponía para la salud de los habitantes de Santiago. Posteriormente, fue aprobado por el Comité de Ministros, una instancia política que consideró que las medidas de mitigación propuestas por la compañía inglesa eran suficientes para revertir lo observado por el SEA. Estas medidas incluyen el recambio de calefactores a leña por aparatos eléctricos en la Región Metropolitana, en un contexto en el que este tipo de artefactos casi no se usan en la zona.
“Se ha dado a conocer la Resolución de Calificación Ambiental del proyecto Los Bronces Integrado.
Se trata de un proyecto con severas deficiencias en su evaluación ambiental, mismas que llevaron al Servicio de Evaluación Ambiental a rechazarlo, fundamentalmente pues no se consideraron los impactos que esto podría tener en la calidad del aire de Santiago.
Pero también, hemos detectado, no se consideraron la afectación de áreas verdes y espacios naturales, hábitats de especies amenazadas en la cordillera de Santiago y también los impactos que esto va a tener sobre campos de nieve y sobre glaciares.
Se trata de un proyecto desconocido que tiene impactos significativos y que tiene esta Resolución de Calificación Ambiental por una operación política orientada a salvar este proyecto, en la cual participaron el gobierno y también la industria.
Se trata de un proyecto cuyas consecuencias son desconocidas por la población de Santiago. Lo que corresponde ahora es evaluar esas consecuencias y también analizar a cabalidad esta Resolución de Calificación Ambiental, justamente para tomar las medidas de resguardo medioambiental necesarias que nos permitan evitar desastres, tanto en el agua como en el aire de Santiago”.
Fuente: Greenpeace Chile.