- Según ASEVA, esta ley, recién despachada desde el Congreso, limita la supervisión de la industria en la Subsecretaría de la Prevención del Delito, dejando fuera la propuesta de contar con un organismo autónomo que cumpla esa función de manera más adecuada.
La Asociación de Empresas de Seguridad Privada y de Transportes de Valores (ASEVA); expresó su preocupación por la implementación de la ley de seguridad privada despachada este miércoles por el Congreso, que quedó a cargo de la Subsecretaría de Prevención del Delito, a través de la creación de una Dirección, y no dependerá de una Superintendencia, tal como lo sugirieron diversos actores durante la discusión del proyecto.
“No desconocemos que la aprobación de esta ley es un tremendo avance y destacamos el trabajo que se hizo en conjunto con el Ejecutivo y el parlamento para aprobarla, pero nos hubiera gustado que la seguridad privada estuviese a cargo de una Superintendencia que deja poco espacio a distintas interpretaciones. Tal como quedó se despachó la ley, la Subsecretaría de Prevención del Delito aplicará, interpretará e impartirá instrucciones de la ley y sus futuros reglamentos, lo que abre la posibilidad de que su aplicación dependa de la autoridad de turno, con criterios diferentes dependiendo de quien esté a cargo”, dijo Hugo Ibaceta, Presidente de ASEVA.
Agregó que esperan que los reglamentos sean dictados y aprobados con “celeridad y no se dilaten en el tiempo. Mientras más largo sea este proceso, más tarde se podrá implementar una normativa que fortalece la industria, pero también entrega mayor protección a todos sus componentes”.
A pesar de lo anterior, el dirigente destacó y valoró la aprobación de la nueva normativa. “Esta ley es un avance histórico para la seguridad privada en Chile, por primer vez, se reconoce la labor de una industria que tiene más de 260 mil componentes y la califica como coadyuvantes de las policías y de las instituciones encargadas de velar por la protección de las personas y distintos espacios públicos y privados en todo el país”, dijo.
Dentro de los aspectos positivos del proyecto ley, ASEVA destaca el fortalecimiento de la coordinación entre la seguridad privada y las policías, que permitirá, entre otras cosas, el traspaso de información entre las entidades obligadas e instituciones del estado. La nueva regulación también permitirá a lugares como los centros comerciales, la coordinación de las medidas de seguridad entre todas las entidades afectadas que estén en el recinto, generando una mayor eficacia en el resguardo de bienes y personas.
“Una vez que la ley esté en régimen, los guardias de seguridad estarán más protegidos, quienes los agredan tendrán una pena mayor. Aquellos que enfrenten niveles de riesgo alto, deberán portar cámaras corporales para tener registro de su actuación y también elementos de protección personal para resguardar su integridad”, explicó el dirigente.
Fuente: Vital Comunicaciones