Clonaciones o patentes adulteradas de vehículos son parte de los hallazgos que realiza Carabineros a diario en las autopistas de nuestro país, con 15 mil situaciones de este tipo y un 86% de casos en la Región Metropolitana, de acuerdo a cifras de concesionarias de autopistas.
Según expertos, la tecnología podría ser parte de la solución. A través de tintas de seguridad inteligentes y refractantes introducidas en las múltiples capas de una patente, una de ellas tiene el potencial de identificar una matrícula falsificada a más de 10 metros de distancia gracias a cambios de color y propiedades de polarización.
Santiago, enero de 2024 – Según el informe de robo de vehículos de la Asociación de Aseguradores de Chile (AACH), hasta diciembre de 2023 se reportaron 1.194 autos asegurados robados, mientras que el total acumulado fue de 14.297 para dicho periodo. Si bien esta cifra representa una baja del 17% respecto a la cifra del 2022 (17.218 autos), los números del 2023 siguen siendo altos en comparación con los registrados en 2021, por lo que las autoridades insisten en la necesidad de aumentar la fiscalización, prevención y crear mejores capas de seguridad para erradicar el problema.
Pero ¿son seguras las patentes chilenas? Según Claudio Pino, gerente de soluciones gubernamentales de SICPA Latinoamérica, “se podrían implementar tecnologías adicionales para mejorar la autenticación de las placas, haciéndolas más visibles. Esto podría incluir la integración de colores que faciliten la autenticación automatizada a través de cámaras y dispositivos que puedan ser proporcionados a las autoridades y policías para simplificar el proceso de autenticación”.
Es en este contexto que la innovación y la tecnología emergen como una solución al problema. Un ejemplo de ello es la denominada OPALINE de SICPA, que, a través de tintas de seguridad inteligentes y refractantes introducidas en las múltiples capas de una patente, tiene el potencial de identificar una matrícula falsificada a más de 10 metros de distancia gracias a cambios de color y propiedades de polarización. Una innovación que permite evaluar la autenticidad de la placa de forma visual o a través de dispositivos, como lentes especiales o cámaras de seguridad.
“Con esto un inspector puede verificar a través de una linterna, por ejemplo, que, en ciertos puntos de la placa la tinta de seguridad cambia de color, y en ocasiones, se revelan diseños que desaparecen. Además, las letras de la placa pueden cambiar de color entre verde y negro, dependiendo del ángulo de incidencia de la luz sobre la patente”, explica Pino.
Actualmente transitan por la autopista cerca de 15 mil vehículos sin patente, con patente oculta o adulterada, duplicando las cifras del año 2015 según la empresa Vespucio Norte, mientras que el Ministerio Público indica que al menos el 86% de los delitos asociados al ocultamiento, adulteración y no porte de la placa patente se cometen en la región Metropolitana. Un problema que podría zanjar la tecnología, según expertos.
Fuente: Corpo.