Carola Saint-Jean Presidenta del Directorio de KIBERNUM
La conmemoración del mes de la mujer nos entrega un espacio para reflexionar sobre la equidad de género en todos los ámbitos de nuestra sociedad. Aunque hemos avanzado, aún enfrentamos desafíos significativos que requieren nuestra atención y acción continua. Más aún para nosotras, las mujeres en cargos de liderazgo.
La brecha de género persiste en todas las áreas, pero especialmente en algunas como la tecnología. Según datos de la Asociación Chilena de Empresas de Tecnologías de Información (ACTI) en 2022, las mujeres representan el 35% de los profesionales IT, mientras que solo el 15% de ellas llegan a cargos gerenciales. Además, la presencia femenina en las grandes empresas tecnológicas a nivel global corresponde al 33%, según datos de Deloitte en 2022.
Con estas cifras resulta imperativo, primero reconocer esta realidad y segundo comprometernos con nuestras acciones, ya que la responsabilidad recae en todos nosotros, como individuos y como sociedad. Debemos trabajar juntos para promover la equidad de género en el sector de tecnología, creando entornos más inclusivos y diversos para todos.
Todo parte desde la educación y las cifras revelan un panorama preocupante. Según el último Informe sobre Brechas de Género en la Educación Superior en Chile, sólo un 19% de mujeres se matriculan en alguna carrera STEM.
En KIBERNUM, estamos comprometidos con esta causa y nos enorgullece ser parte activa de soluciones que promueven la igualdad de oportunidades y un mayor espacio para las mujeres en la industria IT. En nuestra empresa ya estamos viendo resultados tangibles del trabajo que venimos realizando: un 35% de mujeres ocupan cargos de liderazgo y un 53% trabajan en nuestra Casa Central. Reconocemos que al brindar oportunidades para que más mujeres lideren en esta industria, también estamos cultivando modelos a seguir que motivarán a más jóvenes a participar.
Si bien estas cifras son alentadoras, aún hay trabajo por hacer para seguir mejorando cada año, impulsando políticas y prácticas que fomenten la participación equitativa de género en todos los niveles de nuestra organización, porque estamos convencidos que, solo a través de un esfuerzo colectivo y sostenido, lograremos construir un futuro verdaderamente inclusivo y equitativo.
Fuente: Parla