“La condena dictada es proporcional a la gravedad de los delitos. Además es de cumplimiento efectivo, sin acceso a beneficios. Por tanto, hoy podemos afirmar que el 3 Tribunal Oral en lo Penal hizo justicia y envió una señal de cero impunidad.
El trabajo del Ministerio Público acucioso, sin duda, permitió arribar a este resultado, que no solo permite paz y reparación mediante justicia a las familias afectadas, sino también a las mujeres vulnerables que hoy se encuentran enfermas, quienes podrán cumplir su tratamiento con mayor tranquilidad.
Esta sentencia cumple el principio de igualdad ante la Ley, que cualquier persona, sin importar su estrato social, situación económica, u orientación política, en síntesis si tiene poder y comete un delito, tiene la misma pena que cualquier ciudadano.
Esperamos que de ejercer la defensa algún recurso, los Tribunales Superiores de justicia ratifiquen la condena, y no olviden que en sus manos está dar mayor protección de las mujeres vulnerables”.
Fuente: Audentia.