- Los niños se contagian fácilmente del SARS-CoV-2 y pueden transmitir el virus rápidamente en su entorno familiar, social o escolar.
- Aunque las personas vacunadas se puedan infectar, el cuadro clínico tiende a ser más leve, con menor posibilidad de manifestaciones prolongadas y con desarrollo de una inmunidad potencialmente más robusta y duradera.
Chile es el país de las Américas con el más alto número de nuevos casos de COVID-19 y uno de los tres con más altas cifras de nuevas muertes causadas por este cuadro, según el reporte de abril de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Informes de diversas fuentes indican que, con las nuevas variantes, en especial Ómicron, hay un aumento en los casos de quienes no han recibido ninguna dosis de vacuna. Asimismo, se ha determinado que las tasas de hospitalizaciones en menores de 5 años en Estados Unidos fueron 5 veces más altas en período de circulación de Ómicron.
“Es fundamental que los padres entiendan que el virus SARS-CoV-2 sigue circulando. Según el último informe epidemiológico del Ministerio de Salud del 2024 el segundo grupo más afectado por infecciones respiratorias agudas graves asociadas a este virus es el de los menores de 2 años de edad ; por lo tanto, es indispensable vacunarlos para protegerlos adecuadamente, y también es muy importante vacunar a los niños contra la Influenza , virus que está aumentando en forma importante en nuestro país actualmente”, explica la Dra. Alejandra Massoc, Especialista en Enfermedades Infecciosas Pediátricas y Directora Médica de Vacunas del Laboratorio Tecnofarma.
La doctora asegura que las vacunas contra el COVID-19 han demostrado ser efectivas para evitar las hospitalizaciones y muertes debidas a esta causa “Las vacunas en base a la plataforma de ARNm son seguras en todos los grupos de edad, pero en pediatría y adolescentes, presentan un perfil de seguridad aún mayor”.
Cabe recordar que el Ministerio de Salud dispone, de manera gratuita, las vacunas monovalentes actualizadas con la plataforma de ARNm desde noviembre de 2023 para los grupos de riesgo, entre los que se incluye a niños sanos desde los 6 meses que no han recibido su esquema primario de vacunación, y también aquellos con patologías crónicas e inmunosuprimidos desde los 6 meses de edad, así como adultos mayores de 60 años, personal de salud y embarazadas de cualquier edad gestacional.
Una de las principales razones para inmunizar a los niños y adolescentes contra el SARS-CoV-2 es prevenir complicaciones, dentro de las cuales, el Síndrome Inflamatorio Multisistémico (MIS-C) es uno de los más importantes. Posterior a la introducción de las vacunas de ARNm contra SARS-CoV-2, inicialmente en adultos y después en adolescentes y niños, la incidencia del MIS-C ha ido disminuyendo paulatinamente en muchos de los países del mundo en el grupo etario donde este es más frecuente, siendo Chile uno de los primeros países en reportar este impacto.
Asimismo, al no estar vacunados pueden desarrollar el llamado COVID prolongado (post COVID o Long COVID), que consiste en el desarrollo de nuevos síntomas 3 meses después de la infección inicial, con una duración de al menos 2 meses sin otra explicación. Su sintomatología puede durar años e incluso de por vida en algunos casos. Se ha evidenciado que uno de cada cuatro niños puede desarrollar este cuadro. Entre los síntomas descritos en pediatría se encuentran la fatiga, sensación de falta de aire, malestar general, disfunción cognitiva, lo que puede impactar en actividades diarias como asistencia, desempeño escolar y socialización con pares, entre otros. Afortunadamente, estudios en pediatría sugieren que la vacunación disponible contra SARS-CoV-2 disminuye de forma significativa el riesgo de presentar COVID prolongado en población tanto adulta como pediátrica. Por eso “es muy importante que las personas recuerden que esta prevención es anual y debemos, al igual que hacemos con Influenza cada año, el poder recibir la vacuna contra COVID-19 más actualizada disponible para los grupos que determine el Ministerio de Salud”, explica la Dra. Alejandra Massoc.
El impacto favorable de la vacunación contra el SARS-CoV-2 ha sido contundentemente confirmado tanto en adultos como en niños a nivel global. Aunque las personas vacunadas se puedan infectar, el cuadro clínico tiende a ser más leve, con menor posibilidad de manifestaciones prolongadas y con desarrollo de una inmunidad híbrida potencialmente más robusta y duradera.
Más información disponible en www.vacunatehoy.cl
Fuente: Vía Central