- En el contexto del Día Mundial Sin Tabaco especialistas advierten como el uso de vapeadores ha penetrado peligrosamente en la población infanto-juvenil.
“Pasan piola a los ojos de los cuidadores, tienen sabor a chicle e incluso a cookies and cream. Además, existe el mito de que son inofensivos para la salud”, son las tres grandes razones que la broncopulmonar del Programa “A Todo Pulmón” de clínica Alemana, Karen Czischke, esboza para explicar el boom de los vapeadores en nuestro país.
Llegaron a la industria el año 2004, pero al país registran sus primeras apariciones el 2014. Se crearon como terapia alternativa para disminuir el uso del tabaco, pero la misma industria captó una población importante que podrían seducir: a los futuros fumadores y a quienes lo hacen por entretenimiento social.
La Organización Mundial de la Salud “OMS” estima que 37 millones de niños entre 13 y 15 años consume tabaco a nivel mundial. Entre las razones la especialista de clínica Alemana comenta:
• La forma del vapeador lo hace poco perceptible para el adulto cuidador. Algunos, incluso se confunden con un pendrive.
• Su llamativo olor capta la atención de los adolescentes.
• La amplia y novedosa gama de sabores asociados al chicle, cookies and cream, menta, otros.
• El bombardeo publicitario que incentiva al consumo.
Daños a la salud bronquial
En estos 10 años que llevan los cigarros electrónicos en el mercado no hay suficientes estudios en el que se pueda comparar sus efectos con el cigarrillo convencional. Pero sí hay certezas que el humo que se aspira es caliente con 4 a 7 mil partículas distintas.
El acto de vapear es percibido como inocuo para el organismo pese a la alta presencia de compuestos tales como propilenglicol y la glicerina vegetal que se transforma en acroleína causante estrés oxidativo que en su conjunto son potenciales causantes de cáncer y daño en la vía aérea. De igual manera el diasetil llevaría a la bronquiolitis constrictiva, enfermedad irreversible que no cuenta con tratamiento.
Principales perjuicios:
• Aumento de la actividad bronquial debido a la inflamación de la vía aérea (bronquitis y flemas)
• Pacientes con enfermedades crónicas (por ejemplo asma) aumentan el riesgo de presencia de síntomas.
• Disminución de la capacidad inmunológica del cuerpo para combatir infecciones especialmente de bacterias y de cuadros infecciosos respiratorios.
• Daño estructural al pulmón (enfisema) y en la vía aérea.
• Aumento de cuadros de insuficiencia respiratoria que hace colapsar al sistema de servicios de urgencias.
También, se ha detectado daños por explosión. “Estos dispositivos tienen una batería de litio la que en algunos casos producen quemaduras en las manos y rostro”, aclara la broncopulmonar.
Si bien es cierto estos artefactos se crearon para apoyar las terapias de cese de consumo de tabaco el hábito que crea los cigarrillos electrónicos y los vapeadores hace que las personas de acostumbran a su uso. Generalmente, se transforman en fumadores duales (cigarro y vapeador) o recaen con el cese, finaliza la especialista en enfermedades respiratorias.
Fuente: Clínica Alemana