Mauricio Bórquez, Account Manager para Seguridad Pública, Motorola Solutions Chile
En los últimos años, Chile ha enfrentado varios eventos que han afectado significativamente la comunicación a lo largo del país como terremotos, incendios forestales y aluviones entre otros, que ha dejado, en más de una ocasión, a miles de chilenos aislados y, literalmente, a oscuras.
El 27 de febrero de 2010, un terremoto de magnitud 8.8 devastó la zona centro-sur de Chile, causando la destrucción de infraestructuras clave y dejando a numerosas comunas sin comunicación durante varios días. Este evento tuvo un impacto significativo en las regiones del Maule y Biobío, donde la caída de redes eléctricas, la interrupción de servicios telefónicos e internet, además de la destrucción de carreteras, dificultaron las tareas de rescate y la ayuda humanitaria.
En el año 2015, un aluvión en la Región de Atacama causó graves daños, dejando incomunicadas varias localidades debido a la caída de puentes, el colapso de caminos y los daños en la infraestructura de telecomunicaciones. Esto provocó la pérdida de comunicación durante días o semanas en algunas zonas.
Durante el verano del 2017, Chile vivió una de las peores temporadas de incendios forestales de su historia, afectando principalmente las regiones de O’Higgins, Maule y Biobío. Los incendios arrasaron miles de hectáreas de bosques y zonas residenciales, destruyendo líneas eléctricas y torres de telecomunicaciones, y dejando a varias comunas rurales sin comunicación, lo que obstaculizó las operaciones de emergencia.
Los incendios forestales en la Región de Valparaíso de este verano afectaron significativamente las comunicaciones en varias ocasiones. La destrucción de antenas, cables de fibra óptica y cobre, y otras infraestructuras críticas complicó las comunicaciones entre los equipos de emergencia y afectó la capacidad de las autoridades para emitir avisos de evacuación de manera efectiva.
Durante el sistema frontal que afectó a Chile las últimas semanas, se produjeron graves interrupciones en las comunicaciones, especialmente en las regiones centro-sur del país. Las fuertes lluvias y vientos de hasta 180 km/h causaron daños significativos en las líneas eléctricas, dejando a más de 670.000 clientes sin luz. Las interrupciones en el suministro eléctrico afectaron directamente la infraestructura de comunicaciones, dificultando la coordinación y respuesta a la emergencia.
Las comunicaciones durante catástrofes naturales son cruciales para la coordinación eficiente de los equipos de rescate, la distribución de recursos, y la transmisión de información vital. La capacidad de mantener y restablecer canales de comunicación, incluso en condiciones adversas, es esencial para minimizar el impacto de los desastres y acelerar la recuperación.
En este contexto, las soluciones de comunicación proporcionadas por Motorola Solutions a agencias de seguridad juegan un papel fundamental. Estos sistemas avanzados permiten una coordinación eficiente, respuesta en tiempo real, y mantienen la seguridad del personal durante emergencias. La robustez de este sistema es esencial para asegurar la continuidad operacional y una respuesta efectiva ante las demandas de situaciones catastróficas.
Así, una de las grandes lecciones aprendidas durante cada catástrofe natural es que las comunicaciones de las fuerzas de seguridad pública deben ser diseñadas para funcionar cuando nada más funciona, porque es allí donde la comunicación trata de salvar vidas, rol prioritario de las agencias de seguridad del país.
Fuente: Prensa Vía Central