La casa de estudio, que tiene el máximo de siete años de acreditación, reconoció a sus docentes en una actividad realizada en el remozado Gimnasio de la Casa Central.
La Pontificia Universidad Católica de Valparaíso es una institución que valora el aporte que diariamente realizan sus profesores y profesoras, quienes transforman la vida de las personas a través de una docencia de excelencia y contribuyen en investigación y vinculación con el medio. En ese sentido, se efectuó una ceremonia en el remozado gimnasio de Casa Central, donde el rector reconoció la entrega y dedicación de más de 115 académicos y académicas en estas tres categorías.
Al respecto, el rector Nelson Vásquez sostuvo que la PUCV es la universidad más grande de la región y una de las cinco mejores del país. De esta forma, destacó que a través del Plan de Desarrollo Estratégico Institucional se está pensando en el futuro de la casa de estudio, donde un elemento central es la excelencia de su profesorado.
“En estos 96 años de existencia, nueve generaciones de profesores han contribuido con su aporte a engrandecer a la institución. Una universidad de este tipo se construye paso a paso, generación tras generación, quienes han puesto su vida en esta obra de la Iglesia que ha sido levantada por laicos. En consecuencia, se han generado todas las condiciones para que los profesores y profesoras se desarrollen de manera integral. Agradecemos a todos y todas por el esfuerzo y el compromiso de contar con una universidad de excelencia”, complementó la autoridad.
En la ceremonia se otorgaron premios por excelencia en Docencia Distinguida, Investigación y por primera vez en Vinculación con el Medio, además de reconocer a los académicos y académicas por facultad y en las categorías de Formación Fundamental, Programa de Inglés como Lengua Extranjera y el Programa de Enseñanza de las Matemáticas para la Facultad de Ingeniería.
En Docencia Distinguida, el profesor del Instituto de Física, Germán Ahumada, agradeció a la Universidad. “Enfrentamos el tremendo desafío de enseñar a audiencias variadas como futuros ingenieros, estudiantes de pedagogía, kinesiólogos y la necesidad de adecuar los ritmos y estrategias para atender a la diferencia son claves para aportar a la educación en estos tiempos. Esto nos lleva a modificar nuestras propuestas de enseñanza para que los estudiantes no sólo sean formados y valoren nuestra tarea, tal como ocurre hoy con estos premios”, añadió.
El profesor Francisco Isla de la Escuela de Negocios y Economía, también recibió el premio a la Docencia Distinguida. “Es un reconocimiento que no se espera, pero es interesante que viene desde los que trabajan con uno en el aula, de los alumnos y alumnas que comparten la jornada diariamente. El trabajo docente les hace sentido, pues después evalúan nuestro desempeño y nos anima a seguir contribuyendo a la Universidad”, precisó.
Katherine Exxs de la Escuela de Arquitectura y Diseño fue reconocida también en Docencia Distinguida. “Es un gran honor recibir este premio. La PUCV hace un buen trabajo al destacar a los profesores que están permanentemente preocupados de realizar sus clases y recibir la retroalimentación de los estudiantes. La docencia es una de las actividades principales de la universidad”, indicó.
En Investigación, la profesora de la Escuela de Trabajo Social, Leticia Arancibia, destacó el valor que tiene recibir este premio. “Es un reconocimiento a un trabajo colectivo, donde participan investigadoras y estudiantes de pregrado. Nos pone felices porque nuestro trabajo si bien es invisible y de hormiga, se destaca cuando se ven resultados y lo compartiremos con mi Escuela. Agradezco a la Vicerrectoría de Investigación, Creación e Innovación, quienes han estado apoyando desde hace mucho tiempo”, complementó.
El profesor de la Escuela de Ingeniería Industrial, Víctor Leiva fue otro de los premiados en Investigación. “Es un orgullo y representa a todos los grupos de investigación que tenemos en la Universidad. Detrás hay un gran equipo, es un reconocimiento que también representa a mis colegas y a los estudiantes que trabajan en distintos grupos. Nos plantea un desafío para seguir mejorando y seguir desarrollando conocimiento para formar personas y capital humano avanzado”, reflexionó.
En el ámbito de Vinculación con el Medio, la profesora del Instituto de Historia, Paula Soto, destacó que las universidades no pueden entenderse sin una relación estrecha con su entorno. “Es una instancia que nos permite conectar la teoría con la práctica, acercar la investigación y los conocimientos desarrollados en la Universidad a la comunidad. Nos permite también aprender de las comunidades que nos rodean, de esta forma la vinculación con el medio tiene un potencial para desarrollar investigación que aporte a problemas reales, facilitando la transferencia del conocimiento”.
La académica de la Escuela de Psicología, Luisa Castaldi, también recibió el premio en la categoría de vínculos con la comunidad. “Para mi es particularmente relevante este premio porque el trabajo que desarrollamos con la Clínica Psicológica lo desarrollamos hace 25 años y es muy valioso, se relaciona con la vinculación con la gente que tiene necesidad y se relaciona con el ámbito valórico de la Universidad, con las personas que tienen más dificultades de acceso a la salud mental. Es un gran orgullo, pues además contempla un esfuerzo de los estudiantes y pasantes”, precisó.
Al cierre de la ceremonia, se ofreció una intervención musical con una selección del Concierto de Aranjuez, a cargo de un Octeto de Cámara dirigida por Jesús Rodríguez y con la participación del solista y académico del IMUS, Esteban Espinoza.
Fuente: PUCV