“Ha muerto el Papa Francisco. Y en este momento la invitación clave, mientras se activan los
mecanismos sucesorios que están establecidos en los ceremoniales, es rezar por su eterno
descanso. Y, al mismo tiempo, agradecer por tantas cosas que nos deja.
Hay gestos que hizo al inicio de su pontificado, que creo que lo han acompañado desde el 13 de
marzo del año 13 del siglo 21, cuando asume. Y es su insistencia en ser bendecido. En pedir
siempre que recemos por él con una conciencia muy clara de su fragilidad y de que está al servicio
de la comunidad católica y del mundo. El que Jorge Bergoglio haya elegido el nombre Francisco
nos habla de este propósito de reconstruir la Iglesia, que tenía también San Francisco de Asís.
Por último, hay dos pensamientos que están contenidos en sus encíclicas. Laudato Si´ (2015) y
Frateli Tuttti (2020). La primera sobre ecología integral y la segunda sobre la fraternidad universal,
que es un llamado a hacernos cargo de los desafíos que tenemos como planeta, los que son de
vida o muerte”.
Con este mensaje, el capellán general del Hogar de Cristo, el sacerdote jesuita José Francisco
Yuraszeck, ha reaccionado a la muerte del Papa Francisco, al que ayer vimos entregando la
bendición a los fieles con motivo del Domingo de Resurrección.
Fuente: Hogar de Cristo.