En su discurso, destacó que instancias participativas como el Proceso Constituyente amplían oportunidades para “transformar las leyes y las políticas, y también las costumbres y la cultura, en un sentido que nos permita emparejar el terreno para que todas y todos, hombres y mujeres, podamos desarrollarnos plenamente, con seguridad, libertad y equidad”.
La Mandataria Michelle Bachelet participó esta mañana en el seminario internacional sobre “Democracia, Igualdad de Género y Constitución”. Acompañada por los ministros Secretario General de la Presidencia, Nicolás Eyzaguirre; y de la Mujer y Equidad de Género, Claudia Pascual, en la ceremonia que se realizó en el Museo de Artes Visuales, afirmó que “como Gobierno valoramos enormemente estos espacios de reflexión que nos permiten poner en el centro de la discusión aspectos que son claves para avanzar en mayor equidad de género en nuestro país, pero no sólo en nuestro país, en nuestro continente y en el mundo entero”.
La máxima autoridad nacional añadió que “es un compromiso que hemos asumido como país con la comunidad internacional, por medio de acuerdos y mecanismos como la Convención para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, que Chile suscribió hace más de tres décadas, o la Agenda de Desarrollo Sostenible 2030, la Declaración Política de Beijing +20, entre otros”.
En este sentido, ante la Jefa de Liderazgo y Gobernabilidad de ONU Mujeres, Begoña Lasagabaster y la Representante ONU Mujeres Chile, María Inés Salamanca, resaltó que “a medida que más mujeres ingresemos a los espacios de poder, a los órganos ejecutivos, legislativos y judiciales de los Estados, más avanzamos en este camino. Y el Proceso Constituyente que ha iniciado este Gobierno nos ofrece una oportunidad clave para dar los pasos que requerimos para avanzar en materia de equidad de género”.
La Mandataria afirmó que “Chile está en un momento único para perfilar sus bases normativas desde una perspectiva más igualitaria. Como ustedes saben, nos encontramos en un momento constituyente, que se ha iniciado de manera exitosa, con la fase de consultas individuales, por un lado, y encuentros locales autoconvocados, en todo Chile”.
La Jefa de Estado valoró que “Chile ha demostrado, contra el escepticismo de algunos a los que no les gusta la participación, que podemos dialogar con respeto y con altura de miras. Y todas y todos hemos ganado, porque hoy la confianza es un poco mayor”.
Añadió que “acá la ecuación es sencilla: mientras más participación tengamos en instancias como el Proceso Constituyente, más posibilidades tendremos de transformar las leyes y las políticas, y también las costumbres y la cultura, en un sentido que nos permita emparejar el terreno para que todas y todos, hombres y mujeres, podamos desarrollarnos plenamente, con seguridad, libertad y equidad”.
Asimismo, destacó que “si queremos que nuestros pueblos prosperen, que podamos hacer frente a los grandes desafíos que enfrenta hoy el planeta -como el cambio climático o los Objetivos del Desarrollo Sostenible-, es indispensable que las mujeres estemos presentes en los ámbitos de decisión, que tengamos las capacidades, las oportunidades, las garantías institucionales necesarias para desplegar todo nuestro potencial, en la vida profesional, en lo familiar, en el espacio público y en el privado”.
En este sentido, enfatizó que “objetivos como impulsar la participación femenina en igualdad de condiciones en todos los ámbitos de la vida social, y trabajar por cerrar las brechas de género, ya no se entienden sólo como imperativos éticos. Y somos conscientes que, para avanzar en esta dirección, debemos ser capaces de construir juntos un marco jurídico que nos pertenezca y represente a todos y todas; que dé cuenta de los anhelos y valores que compartimos como compatriotas. Una Constitución que forje las bases de esta casa común en la que todos tengamos cabida”.
Al finalizar su discurso, sostuvo que “esa es la razón porque hemos asumido esta tarea con la responsabilidad que amerita, y la estamos llevando a cabo de manera verdaderamente democrática, empleando mecanismos de participación inéditos, porque creemos que de esta manera, de una manera más participativa, más democrática, las políticas del Estado y las discusiones ciudadanas sirven a un mismo propósito: empoderar a las personas y permitir que la equidad sea una realidad encarnada en las instituciones”.
Fuente: Prensa Presidencia.