· Sin perjuicio que como SNA respetamos las resoluciones de la justicia, es incomprensible que en estos cuatro años de investigación judicial se establezca que no hubo pruebas suficientes para inculpar. Nos genera indignación que un crimen tan deleznable y cobarde como el que afectó a la familia Luchsinger- Mackay quede impune.
· Resoluciones como éstas nos revelan que algo está fallando en nuestro sistema procesal penal y el Estado tiene que hacerse cargo. Esperamos que a partir de este hecho se puedan establecer urgentes medidas correctivas en los procesos de investigación que permitan a futuro esclarecer y aplicar el máximo rigor de la ley en los diversos casos de violencia que aún están abiertos, sin condenas ni responsables.
· Compartimos la desesperanza e impotencia de la familia Luchsinger-Mackay así como también la de otras víctimas de violencia que piden justicia y que estos delitos dejen de quedar en completa impunidad.
Ricardo Ariztía
Presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura