El especialista en litio y académico de la Universidad de Santiago de Chile, Dr. Domingo Ruiz, si bien admite que el eventual acuerdo con Corfo, que permitiría a SQM aumentar su cuota de producción del mineral, instalaría a Chile dentro de los más importantes exportadores a nivel mundial, señala que, antes de esto, deben quedar establecidas las regulaciones medioambientales que aseguren que no se afectará el ecosistema. “Los salares tienen una microfauna que depende de las concentraciones de sales que están en estos. Si se alteran por aumentar las tasas de producción de litio, la preocupación es cómo se va a mantener dicha microfauna”, sostiene.
La nueva conciliación entre SQM y Corfo podría terminar con el arbitraje que los mantiene enfrentados ya que, según fuentes cercanas al acercamiento, se mantendría el aumento de cuota establecido en el acuerdo, que antes fracasó y que fijaba un permiso de extracción en 180 mil toneladas de litio metálico, cercano a las 950 mil toneladas de carbonato de litio equivalente. Esto podría ser extraído por Soquimich en el Salar de Atacama desde 2022 y hasta 2030.
El experto en litio y académico de la Universidad de Santiago de Chile, Dr. Domingo Ruiz, reconoce que esta eventual cuota de extracción podría posicionar al país entre los mayores exportadores del mineral. Sin embargo, advierte que, antes de iniciar la extracción de litio, lo primero es establecer regulaciones medioambientales que aseguren que no se afectará la biodiversidad de los salares.
“Los salares tienen una microfauna que depende de las concentraciones de sales que están en estos. Si se alteran por aumentar las tasas de producción de litio, la preocupación es cómo se va a mantener dicha microfauna”, sostiene.
El doctor en química indica que este tema surgió en el informe de la Comisión Nacional del Litio, en 2015, que, justamente, daba cuenta de la falta de regulación en la materia, lo cual “aún no está formalizado y, por lo tanto, queda en tierra de nadie”, considera.
“En los salares se extraen salmueras y se depositan en grandes piscinas, donde quedan hasta que se evapore el agua. Todos los excedentes vuelven a reinyectarse al salar, por lo que hay un equilibrio hidrodinámico que se está modificando de manera permanente”, explica.
Subir el royalty
Por otra parte, el académico sostiene que, a la luz de que las principales empresas que extraen el mineral estratégico para Chile son privadas, la ley debiera estipular un royalty alto que resguarde los intereses económicos del país.
“La licitación sigue siendo muy desbalanceada respecto a los intereses del país. Tenemos materia prima y el know-how de cómo extraerla. Sin embargo, el royalty regala un porcentaje importante de la concesión. Además la licitación nunca es demasiado cara, por lo que no queda claro cuánto es el retorno para el país”, critica.
Agregar valor
Finalmente, el académico valora los avances del país en los últimos diez años para agregar valor a la extracción de una materia prima importante como el litio. Sin embargo, estima que aún es muy incipiente.
“Vamos en la dirección correcta, pero falta trabajo que hacer todavía. Es una industria muy incipiente concentrada en la extracción de carbonato de litio y su purificación”, concluye.
Fuente: USACH.