¿Te cuesta mantener la concentración? Además de practicar yoga, meditación y oír música, existen ciertos alimentos que han comprobado ser muy efectivos para mejorar la concentración mental, estar más despiertos y llenos de energía, asegura la nutricionista de Clínica Ciudad del Mar, Cecilia Cruz.
La concentración mental consiste en centrar voluntariamente toda la atención de la mente sobre un objetivo o actividad, ignorando otras situaciones que puedan interferir en la atención. La concentración es fundamental para el estudio y el trabajo. Muchas personas pierden la concentración con facilidad, y para ellos, una adecuada alimentación les ayudará a mejorar la memoria y concentración.
La nutricionista de Clínica Ciudad del Mar, Cecilia Cruz, indica cuáles son los alimentos que ayudan a mantenernos alerta y con más energía en nuestra rutina diaria, ya sea de estudios o jornada laboral.
Alimentos que ayudan a la concentración:
Plátano: esta fruta contiene mucho potasio, vitamina C, magnesio y fibra, por ello se considera un alimento perfecto para mejorar las funciones cerebrales, sobre todo la memoria. Además aporta vitamina B6, que ayuda en la producción de varios neurotransmisores relacionados a la concentración, como la dopamina, norepinefrina y serotonina.
Pescado: los denominados “pescados azules” (atún, jurel y salmón entre otros) tienen una buena cantidad de ácidos grasos omega 3, aceites naturales que benefician el sistema nervioso central, en los niños ayuda en su desarrollo, y en los adultos lo refuerza. Para aprovechar al máximo las bondades del omega 3, se sugiere consumir el pescado a la plancha, al vapor o al horno.
Frutos secos: nueces, almendras y maní son algunos de los alimentos más completos, ya que además de aportar vitaminas y antioxidantes muy beneficiosos, poseen omega 3 de origen vegetal, lo que beneficia la concentración, y además protegen las arterias y los vasos sanguíneos, permitiendo la correcta circulación y oxigenación del organismo.
Palta: es beneficiosa tanto para el cerebro como para el corazón, ya que ayuda a limpiar las arterias y mejorar la circulación sanguínea. Si nuestro corazón bombea correctamente la sangre hacia los órganos, y el cerebro está oxigenado, podemos rendir más en todo sentido. La palta tiene grasas monoinsaturadas que ayudan en la concentración y la memoria.
Cereales integrales: el pan integral y las galletas de grano entero contienen un aminoácido llamado L-Triptófano, el cual es absorbido por el cerebro para producir serotonina. Este neurotransmisor induce a la relajación y al sueño, es decir, ayuda a reducir los niveles de estrés y aumentar la concentración.
Yogurt: los lácteos en general contienen calcio y nutrientes, y el yogurt aporta además un aminoácido llamado tirosona, que colabora en la producción de neurotransmisores (como noradrenalina y dopamina) que mejoran la memoria y el sentido de alerta.
Arándano: contiene múltiples antioxidantes que activan las enzimas del cerebro y mejoran la memoria y la concentración durante todo el día. Se recomienda consumir media taza de arándanos mezclado con yogur natural a mitad de mañana, para disfrutar de los beneficios de ambos alimentos.
Pollo: al consumir proteínas, el organismo libera un aminoácido llamado L-Tirosina, que sintetiza los neurotransmisores dopamina y noradrenalina, y esto permite pensar de manera más rápida y clara. El pollo contiene proteínas de excelente calidad, sobre todo cuando es consumido a la plancha, al horno o al vapor. Se sugiere incluirlo en la dieta dos o tres veces a la semana.
Chocolate negro: para mayor efectividad debe ser amargo y con mucho cacao, ya que éste último tiene la capacidad de estimular el sistema nervioso, segregar endorfinas, saciar el apetito y reducir la ansiedad. Además, mejora la memoria y la concentración.
Semillas de maravilla: contienen vitamina B1 que aporta en la función cognitiva y de la memoria. Además poseen triptófano, un aminoácido que se convierte en serotonina, produciendo el mismo efecto que el chocolate, ya que favorece memoria y concentración.
Carnes rojas: las carnes rojas contienen B12, una vitamina que presenta efectos positivos en la concentración, pérdida de memoria, estado anímico y aumento de energía.
Pastas: contienen carbohidratos complejos que proveen de glucosa al cerebro, lo que permite un funcionamiento cognitivo superior. Con una porción pequeña es suficiente, y sin excederse en las salsas ni queso rallado. Se puede acompañar con ensaladas y verduras.
Una correcta alimentación tiene muchas ventajas para la salud, además de evitar el sobrepeso y las enfermedades asociadas, favorece un mejor funcionamiento de la concentración y memoria. “Si queremos mejorar la concentración, conviene empezar a incluir estos alimentos en nuestra dieta, al menos una vez a la semana, ya que además de ser sanos y naturales, ayudan a mejorar nuestra salud en general”, enfatiza Cecilia Cruz, nutricionista de Clínica Ciudad del Mar.
Fuente: Factor C.