Con una entretenida clase de baile de ritmos latinos, a cargo de la profesora Mau Montecinos, y un show que incluyó rosas rojas de regalo por parte de los integrantes del clan Rojo de TVN, acogidos y trabajadores celebramos San Valentín en el Hogar de Cristo.
En una radiante mañana de sol, fueron llegando los acogidos de las hospederías y participantes de programas del Hogar de Cristo para disfrutar de una clase de baile entretenido que les elevaría el ánimo a más no poder. La clase fue impartida gratuitamente por una incansable y energética profesora, Mau Montecinos, quien con su academia itinerante Sabor & Swing recorre las comunas del sector centro y sur de la capital, “donde las academias nunca llegan”, para contagiar su alegría y ritmo a las personas de escasos recursos.
El objetivo era celebrar el Día del Amor y la Amistad, que se conoce en otros países como el Día de San Valentín, y nadie quería quedarse fuera de la fiesta. Por ello, se sumaron tres integrantes del clan Rojo de TVN: Camila Vásquez, Matías Falcón y Raúl de Jesús Valdés, quienes regalaron rosas rojas a todos los asistentes en medio de un improvisado show que incluyó canciones, besos, abrazos y las infaltables selfies que todos querían guardar de recuerdo.
La salsa, la bachata y el reggaetón fueron los telones de fondo de esta movida jornada compartida por más de 70 acogidos de nuestros programas que atienden a personas en situación de calle, con discapacidad mental, en apoyo terapéutico y adultos mayores en protección integral. Tal como los invitaba la profesora Mau Montecinos: “No existe ningún impedimento para bailar, porque el que está en silla de ruedas puede mover sus brazos, lo importante es el ánimo y el entusiasmo. Aquí no se aceptan los mirones”. Energética a mil, alentó a todos con estas arengas y contagiando a todos con su vitalidad.
La famosa canción de José Luis Rodríguez, “Tendría que llorar por ti”, que cantó Raúl de Jesús Valdés, del clan Rojo de TVN, puso término al evento en medio de aplausos y abrazos de camaradería. Para recuperar las fuerzas, todos fueron invitados a refrescarse con las deliciosas frutas regaladas por la Vega Central. Así, entre sandías, melones, plátanos, manzanas y duraznos, se puso término a un inolvidable 14 de febrero de 2019.
Fuente: Comunicaciones Hogar de Cristo.