- Pese al complejo escenario que se ha instalado debido a la pandemia por Covid-19 y la profunda escasez hídrica, solo en el primer semestre, la compañía ejecutó inversiones por $ 68.405 millones en proyectos para reforzar la seguridad y el respaldo en el suministro, destacando obras como los Pozos de Cerro Negro – Lo Mena y la modernización y ampliación de la Planta Padre Hurtado.
- En tanto, la utilidad descendió 6,5% hasta los $ 58.291 millones respecto del mismo periodo de 2020, debido principalmente al mayor coste financiero asociado a la inflación.
Santiago, 26 de agosto de 2021. Hoy, Aguas Andinas entregó los resultados de su gestión financiera al primer semestre de 2021, ejercicio en que destacó la continuidad de su intensivo plan de inversiones en un contexto marcado por las dificultades que imponen el cambio climático y sus consecuencias, así como los efectos de la emergencia sanitaria por Covid-19. En esa línea, la compañía informó que, al 30 de junio de 2021, ejecutó inversiones por $68.405 millones.
Así, la compañía ha continuado desplegado sus esfuerzos a través de diversos proyectos para robustecer el suministro y la resiliencia en Santiago, entre los que destacan los avances de los Pozos de Cerro Negro – Lo Mena, infraestructura que permitirá reforzar el suministro de agua potable del sector sur de la ciudad; la permanente renovación de redes de agua potable y aguas servidas, y la ampliación y modernización de planta de tratamiento agua potable Padre Hurtado; que reforzará el abastecimiento en la zona oriente, entre otras.
Adicionalmente, Aguas Andinas ha reforzado la compra de agua y la captación subterránea, manteniendo niveles de seguridad en el embalse El Yeso y permitiendo almacenar un volumen de 174,9 hm3 al cierre de junio 2021, lo que se traduce en un incremento de 55% sobre los 112,8 hm3 de volumen almacenado al cierre de junio del año pasado. En esta gestión ha sido fundamental el trabajo mancomunado con la Asociaciones de Regantes de la Primera sección del río Maipo con quien la compañía recientemente firmó un acuerdo de colaboración que permitirá contar con una cuenca cada vez más sostenible frente a la emergencia climática.
“El actual contexto es complejo y nos exige seguir realizando un gran esfuerzo de adaptación para abastecer a la ciudadanía de un recurso esencial como es el agua, en medio de un escenario en que se da un desequilibrio entre el balance de oferta y demanda. Ante ello, es necesario contar con nuevas fuentes, mayor redundancia en la
infraestructura y fortalecer la resiliencia del sistema para entregar un suministro cada vez más robustecido a pesar de las condiciones, cada vez más extremas. Para ello, seguiremos desplegando una intensa estrategia preventiva, disponiendo de todos los recursos económicos, técnicos y humanos para asegurar la continuidad de la operación, velando por un suministro seguro en un momento crucial, pero protegiendo también la salud de nuestros trabajadores y sus familias y, a la vez, de la comunidad”, señaló Marta Colet, gerenta general de Aguas Andinas.
Resultados financieros
Cabe destacar que la utilidad de Aguas Andinas descendió 6,5% (2,4% sin considerar el resultado de operaciones discontinuadas de ESSAL en 2020) hasta los $ 58.291 millones respecto del mismo periodo de 2020, debido principalmente al mayor coste financiero asociado a la inflación.
Asimismo, el resultado operativo de la compañía se sitúa ligeramente por encima de lo obtenido en el mismo ejercicio de 2020, debido principalmente a la actividad “no sanitaria” o de “no agua” lo que permitió compensar los mayores costes operativos derivados de la compra de agua ligada a la profunda escasez hídrica y el mantenimiento de redes de agua potable y servidas.
Cabe destacar que los resultados de Aguas Andinas continúan estando afectados por los impactos globales de la pandemia, los que se estiman en $ 16.766 millones comparados con un año sin crisis sanitaria.
Hitos del ejercicio
Cabe destacar que en Junta Ordinaria de Accionistas, celebrada en abril pasado, se acordó la distribución de las utilidades del ejercicio 2020, las que ascienden a $ 98.692 millones y que excluyen el resultado de venta por activos, neto de impuestos y el dividendo provisorio pagado el 18 de diciembre del año pasado por un monto de $ 64.800 millones. Así, la utilidad acordada a distribuir asciende a $ 65.181 millones, correspondiendo a $26.745 millones al ejercicio 2020 (dividendo adicional) y $38.436 millones a utilidades acumuladas (dividendo eventual), lo que significa un dividendo definitivo de $10,65 por acción, exigible desde del 18 de mayo de 2021.
Fuente: Ek.