-La directora ejecutiva de ComunidadMujer y precandidata independiente a constituyente por el Distrito 11 lamentó la mala calificación de Chile en el ranking elaborado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo y abogó por consensuar una agenda para la igualdad de género.
Santiago 15 de diciembre de 2020. Un urgente llamado a avanzar en una agenda de equidad de género hizo la directora ejecutiva de ComunidadMujer y precandidata independiente a la Convención Constitucional por el Distrito 11, Alejandra Sepúlveda Peñaranda, luego de conocerse el mal resultado del país en el Índice de Desarrollo de Género del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Chile obtuvo 0.962 puntos, ubicándose en el puesto 62 a nivel mundial, lo que a juicio del PNUD es “una mala posición” si se considera que en América Latina el Índice de Desarrollo de Género (IDG) es de 0.978 y que los países de alto desarrollo humano alcanzan un IDG de 0.979.
“Es muy llamativo que Chile se mantenga en la categoría de los países de alto desarrollo humano, que sea el mejor posicionado a nivel regional, pero que al incorporar la variable de género el panorama sea tan diferente. Esto no hace más que demostrar, una vez más, que tenemos demasiadas brechas de desigualdad abiertas que dificultan el pleno ejercicio de los derechos y autonomía de las mujeres”, dijo Sepúlveda Peñaranda.
“Contar con un mecanismo paritario para redactar una nueva Constitución ya es un gran avance, pero tenemos que lograr que esa paridad se exprese de manera concreta en una Carta Magna que consagre la democracia de género y los iguales derechos y oportunidades y la no discriminación. Las deudas pendientes son relevantes. En materia económica, por ejemplo, la demanda por la igualdad salarial, que según algunas encuestas debe ser la primera prioridad en el debate constitucional; mayor participación en el mercado laboral y en trabajos de calidad y la promoción de la corresponsabilidad social y parental, que permitan el despliegue de sus proyectos de vida. Y, por su puesto, la eliminación de la violencia contra las mujeres en todas sus formas. Hay que extender la paridad de género a todos los ámbitos”, agregó Alejandra Sepúlveda Peñaranda.
A juicio de la precandidata a constituyente por el movimiento Independientes No Neutrales, una de las manifestaciones más concretas de la desigualdad de género, que se ha hecho visible en los últimos días, es la situación de las miles de mujeres que esperan el pago de pensiones de alimentos por parte de sus ex parejas, obligadas a asumir solas la crianza de sus hijos e hijas, con todas las responsabilidades y angustias que ello conlleva.
“Desde que se iniciaron los retiros del 10% de los fondos previsionales, hemos conocido el llamado de alerta de agrupaciones de mujeres, frente a esta gran injusticia que supone el que tantas familias no puedan conseguir los recursos que les corresponden para alimentar a sus hijos e hijas. No estamos hablando de un beneficio, sino de algo que les pertenece, que es la obligación legal de sus padres y no solo de sus madres de brindarles protección. Muchas de ellas denuncian amenazas y amedrentamientos por parte de sus ex parejas para que no hagan el trámite, lo que es de extrema gravedad”, sostuvo.
“El hecho de que algunas mujeres se inhiban de solicitar la pensión de alimentos, ya sea por el rechazo de sus ex parejas o por el desgaste que significa iniciar el proceso judicial, es la expresión más dura de esta inequidad. Puede que a nivel general seamos líderes en desarrollo humano, pero en lo que a género se refiere en Chile las mujeres seguimos rezagadas, producto de la desigualdad estructural que nos afecta, y que no es solo cultural, sino que es producto de un marco normativo e institucional que sigue muy al debe,” añadió la directora ejecutiva de ComunidadMujer.
De acuerdo al Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género, el 80% de las deudas por pensiones alimenticias se encuentran impagas, por lo que Alejandra Sepúlveda Peñaranda consideró como una buena señal el anuncio del gobierno sobre un proyecto de ley para facilitar el pago de estos compromisos.
Sin embargo, apuntó a la necesidad de generar una agenda más completa para abordar los déficit que persisten respecto a los derechos de las mujeres, “por ejemplo en materia de autonomía económica y promoción de la corresponsabilidad social y parental, con iniciativas que se trabajen en conjunto con las agrupaciones de la sociedad civil y las organizaciones que trabajan por los derechos de la mujer. Propuestas de cómo avanzar en estos desafíos hay muchas y están debidamente documentadas, por ejemplo, en el trabajo que se ha hecho durante años por distintas organizaciones, entre ellas, ComunidadMujer”, concluye.
Fuente: Compactolab.