“Los silencios de la Presidenta se suman la falta de convicción y estrategia de sus colaboradores. Cada nueva revelación de la prensa sobre el caso Caval deja al gobierno en una suerte de orfandad comunicacional, a la defensiva y sin capacidad de respuesta real y efectiva”, dijo el parlamentario.
El diputado de la UDI Enrique van Rysselberghe afirmó que “el caso Caval ha dejado en evidencia la incapacidad del gobierno para enfrentar situaciones complejas”, expresando que “por varias semanas el caso del hijo de la Presidenta ha ocupado titulares y ha revelado lo complejas que pueden ser las relaciones entre negocios y la familia presidencial”.
A juicio de Van Rysselberghe, lo que más llama la atención no son sólo las investigaciones en curso, sino “la escasa o nula capacidad de prever y conducir una crisis política que afecta el corazón del bacheletismo”.
“Este fin de semana el ministro del Interior señaló que la Mandataria nada sabía sobre el segundo contrato escandaloso de Caval, mientras el vocero de gobierno se esforzaba en señalar la obviedad que este era un contrato entre privados y que el gobierno no tenía participación en eso. Y como estas declaraciones no aplacaron la ansiedad de la opinión pública, la Presidenta debió señalar el lunes que no había ciudadanos de segunda y primera frente a la justicia, declaración que evidentemente tampoco resuelve las dudas e interrogantes que el país tiene con el caso Caval”, apuntó.
En esa línea, el diputado de la UDI manifestó que “los silencios de la Presidenta se suman la falta de convicción y estrategia de sus colaboradores. Cada nueva revelación de la prensa sobre el caso Caval deja al gobierno en una suerte de orfandad comunicacional, a la defensiva y sin capacidad de respuesta real y efectiva”.
“La crítica sobre el caso Caval hace rato que dejó de estar centrada en la familia presidencial, sino en la nula capacidad del gobierno de manejar una crisis que afecta los pilares programáticos de este gobierno, porque justamente demuele y destruye los principios de igualdad y la idea de terminar con los abusos que fueron consignas claves de esta administración en los primeros meses de gobierno”, dijo.
Por lo anterior, para Enrique van Rysselberghe “la mala gestión de la crisis por parte del gobierno lo ha convertido incluso en una grave amenaza institucional que puede dañar de manera severa la institución presidencial”.
“Claramente el gobierno y particularmente la Presidenta enfrente un grave problema de credibilidad y confianza. Y la forma en cómo el gobierno aborda el caso Caval no ayuda en nada descomprimir la tensión ni a que las personas confíen nuevamente en las instituciones y en la jefa de Estado”, finalizó.
Fuente: Prensa Comité Diputados UDI.