En relación con la nominación de un Notario para la ciudad de San Fernando, me permito precisar lo siguiente:
1.- Sabido es que, de acuerdo a la ley, los Notarios son nombrados por el Ministro de Justicia y Derechos Humanos, “por orden del Presidente de la República”, de una terna elaborada por la Corte de Apelaciones respectiva, sin que este Ministerio o la Presidenta puedan prescindir de alguno de los tres nominados.
2.- En la especie, la aludida terna estaba integrada por una Sra. de apellidos Chadwick Vergara, actual Notario y Conservador de Minas de Chimbarongo; un Sr. Ortega Jirón, Defensor Penal Público de Rancagua; y un Sr. Toledo Ríos, desde hace dos años Jefe de la Unidad contra el Tráfico de Estupefacientes en la Fiscalía Nacional del Ministerio Público en Santiago y, anteriormente, Fiscal Regional en Rancagua. No conozco a ninguno de los mencionados y los tres cumplían en exceso los requisitos para acceder a dicho cargo.
3.- Como comprenderán, en estos tiempos de escándalos y sensacionalismos, mi dilema fue que, respecto de cualquiera de los indicados, era fácil urdir tesis de tráfico de influencias, presiones indebidas o pago de favores. Si nombraba a la primera, no faltarían los que elucubrarían que lo hacía para congraciarme con el futuro Ministro del Interior, dado que son parientes. Si nominaba al segundo, inventarían que lo hacía para beneficiar a un funcionario dependiente de este Ministerio, ya que la Defensoría Penal Pública es uno de los Servicios del mismo. Y, si designaba al tercero, fabularían con que se estaban pagando imaginarias ayudas por su pasada intervención en el denominado caso Caval.
4.- Analizado y reflexionado el caso, finalmente nombre a don Luís Toledo Ríos, puesto que no encontré ningún antecedente que nos impidiese ética o legalmente hacerlo, salvo los decires y suspicacias de algunos interesados, máxime cuando su formación y experiencia profesional lo justificaban, a lo que se unía la alta votación que había obtenido en dos ocasiones en la I. Corte de Apelaciones de Rancagua.
5.- Deploro la artificial controversia comunicacional suscitada, la irresponsable forma como se enloda la honra de las personas involucradas y los términos en que se alienta la desconfianza ciudadana. El tiempo dirá si alguna vez el Parlamento cambia el actual sistema de nombramiento de Notarios y Conservadores y, cuando ocurra, si se incluye una causal de inhabilidad para los parientes de los nominados Ministros de Estado, funcionarios de organismos dependientes del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos o integrantes del Ministerio Público.
Jaime Campos Quiroga
Ministro de Justicia y Derechos Humanos