Santiago, 27 de julio de 2015: Aplicar restricción vehicular por congestión durante todo el año, desincentivar la compra de vehículos diesel por medio de un “impuesto a la contaminación” y el aumento sostenido de ejes ambientales y vías exclusivas, son las principales propuestas que lanzó la Asociación de Concesionarios de Transporte Urbano de Superficie (Actus) ante la eventual aplicación de restricción vehicular para catalíticos anunciada por el Ejecutivo.
Según Víctor Barrueto, director ejecutivo de la entidad gremial, “la restricción vehicular permanente a catalíticos mejoraría instantáneamente el Transantiago, ya que la congestión es uno de los principales factores que entorpecen el tránsito fluido de los buses, lo cual no impide que en paralelo se impulse una mejora integral al sistema para constituirlo en una alternativa eficaz y segura que consolide el desincentivo al uso del automóvil particular”.
La propuesta de Actus se basa en un paquete de 13 medidas específicas que a juicio de los operadores de Transantiago permitiría enfrentar en forma integral –al alinear correctamente los incentivos- la contaminación y congestión que vive Santiago. Para el ex intendente metropolitano, “aplicando este plan integral se fomenta un cambio de modelo de movilidad hacia una ciudad más amable, verde, y centrada en modos más sustentables: bus y bici”.
Las medidas son:
1. Restricción vehicular permanente para vehículos catalíticos todo el año.
2. Sistema aleatorio para la elección del dígito de patente a restringir y normativa que asegure que el último número de patente sea igual para vehículos de un mismo dueño, independiente de la cantidad que posea.
3. Aumentar la cantidad de vías exclusivas actuales, unificándolas con los llamados “Ejes Ambientales”.
4. Dejar fuera de la restricción a los vehículos de tecnologías limpias (Euro VI, híbridos, eléctricos) y generando garantías tributarias para su adquisición.
5. Desincentivar, por medio de un “impuesto a la contaminación” la compra de vehículos particulares diesel, en particular aquellos de mayor antigüedad.
6. Medidas fiscales, como exención tributaría o subsidios medioambientales, para fomentar la renovación de flota del transporte masivo por buses mejores y menos contaminantes (Euro VI, híbridos, eléctricos).
7. Acelerar los plazos de mejora en infraestructura para el transporte público de superficie (como corredores y zonas paga) con metas medibles y cuantificables en el mediano plazo.
8. Redistribuir el espacio vial público para dar prioridad al bus y la bicicleta, para hacer más equitativo el acceso vial de estos modos en comparación con el automóvil particular.
9. Eliminar estacionamientos de superficie en zonas saturadas.
10. Establecer estacionamientos públicos concesionados económicos, cercanos a estaciones de Metro e intermodales ubicadas en el torno del anillo intermedio urbano de Santiago, para fomentar el uso del transporte público.
11. Coordinación de los semáforos en las 50 intersecciones más conflictivas para el transporte público, donde se establezca una prioridad efectiva a los buses.
12. Acelerar la implementación de ciclovías de alto estándar y la conectividad entre ellas con el objetivo de generar una red eficiente y segura para el usuario.
13. Fomento de la intermodalidad entre bicicleta y bus mediante integración tarifaria de cicleteros en las 100 paradas de bus de mayor demanda del sistema de transporte público, utilizando la tarjeta BIP! como modo de pago.
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