Nuevo desafío del cambio climático para la producción de agua potable
¿Cuán extremos e inusuales fueron los efectos del fenómeno “río atmosférico”?
- Con volúmenes de agua caída nunca antes vistos en Santiago en esta fecha, este fenómeno marcó un récord por sus históricos niveles de turbiedad y porque la prolongación de su efecto tenía probabilidad de apenas 1% para el río Mapocho, según muestran los registros históricos.
Santiago, 4 de febrero de 2021 –. Con 40 milímetros de lluvia caída en la ciudad en un solo día y 90 milímetros de lluvia caída a la altura del Embalse El Yeso, el reciente fenómeno del “río atmosférico” ha marcado un récord histórico por su magnitud, en un mes en que el promedio desde que existe registro es menos de 1 milímetro de lluvia en todo el mes.
La consecuencia de este severo frente de mal tiempo en las condiciones de los ríos no solo salta a la vista, sino que también en las estadísticas: más de 61.000 UNT (unidades netas de turbiedad) fue el peak que alcanzó la concentración de lodo en el río Maipo, mientras que para el río Mapocho superó llegó a los 153.000 UNT, una concentración que no se había producido desde que existen registros.
Como referencia, una planta de producción de agua potable tiene la capacidad para enfrentar el sedimento que arrastran los ríos, recurriendo a piscinas decantadoras, pero el máximo que resisten son las 4.000 UNT. O sea, la turbiedad en el río Maipo superó en 15 veces la capacidad máxima de las plantas; mientras que en el río Mapocho superó en 38 veces la capacidad máxima.
También resulta algo inusual que se haya producido una emergencia de estas características de forma simultánea en la cuenca del río Mapocho, del río Maipo y en la ciudad a la vez. Esta combinación tiene una probabilidad del 20%, según los antecedentes históricos.
La extensión temporal de estos altos niveles de turbiedad también da cuenta de la particular excepcionalidad de lo registrado este fin de semana. De acuerdo con la información histórica, la probabilidad de que en el río Maipo se registre un evento que tenga un peak de 61.000 UNT y su impacto impidiera la producción en las plantas por más de 62 horas es de 10%.
En tanto, en el caso del río Mapocho, la probabilidad de un caso en que la turbiedad llegara a las 153.000 UNT y su efecto se prolongará más de 70 horas es de apenas 1%.
Estos fenómenos tan extraordinarios, fruto del cambio climático, exigen que se siga trabajando en un plan de adaptación.
Por eso, si bien dadas estas cifras la infraestructura de reserva de Aguas Andinas está hoy ya preparada para enfrentar más del 90% de los posibles incidentes sin recurrir a suspensiones de servicio, la empresa es consciente de que es necesario ir más allá. Y por eso tiene en carpeta proyectos para alcanzar las 48 horas de autonomía.
Entre dichos proyectos se encuentran los 15 pozos de extracción subterránea de más de 300 metros de profundidad, que dan respaldo al sistema Cerro Negro / Lo Mena, hoy en construcción, y que reforzarán el suministro para más de 400 mil personas de Puente Alto, La Pintana, El Bosque y San Bernardo. Estas obras permitirán alcanzar las 37 horas de autonomía, y se estima que estarán listas a fines de 2022.
Adicionalmente, se encuentra la construcción de la conducción El Manzano – Pirque, nuevo punto de captación en el río Maipo y que estará 5,7 kilómetros más arriba que la actual Toma Independiente. Con una inversión de $31.000 millones, esta obra permitirá alcanzar las ansiadas 48 horas, y se espera que esté lista a fines de 2024.
Fuente: Aguas Andinas.