– Si bien no se sabe exactamente cuál es la causa de esta patología, hay algunos factores que inciden en ella, entre ellos mantener un exceso de peso al embarazarse, sedentarismo o la postergación de la maternidad más allá de los 35 años.
La diabetes gestacional es una condición en la que existe una alteración metabólica que se puede presentar durante cualquier período del embarazo. “Es posible proyectar que alrededor del 10% de las embarazadas en el mundo presentan esta patología, y se debe considerar que esta cifra va en aumento progresivo”, afirma el diabetólogo de Clínica INDISA, Dr. Edwin Schwartstein.
Se trata de una enfermedad en la que el cuerpo no puede producir ni utilizar la insulina necesaria para que la glucosa ingrese a las células y se utilice como energía, “por lo que la glucosa se acumula en la sangre. Eso se denomina hiperglucemia”, precisa la nutricionista de Clínica INDISA, Dana Bortnick.
En la actualidad, no se sabe exactamente cuál es la causa de esta condición, sin embargo hay algunos factores que la inciden, entre ellos mantener un exceso de peso al embarazarse, sedentarismo o postergación de la maternidad más allá de los 35 años.
Los síntomas más comunes de la diabetes gestacional son:
• Sed.
• Polidipsia (aumento del consumo de agua).
• Poliuria (aumento de la micción).
• Fatiga.
No obstante, la nutricionista destaca que la mayoría de las mujeres no presenta signos previos ni síntomas perceptibles que llamen la atención de inmediato, por lo que para detectar esta patología es necesario efectuar constantes chequeos médicos, donde se tengan considerados los factores de riesgo.
¿Qué tener en cuenta cuando se está embarazada?
De acuerdo con lo que explica el diabetólogo, Dr. Edwin Schwartstein, los principales aspectos que se debe atender cuando una mujer está embarazada y que pueden significar factores predeterminantes son:
• El sobrepeso y la obesidad.
• El número de partos anteriores.
• La edad en la que se está embarazada.
• Los antecedentes familiares en los que se presente esta condición.
• Polihidramnios y macrosomías en embarazos anteriores, es decir recién nacidos que presenten un peso mayor a los 4 kilos.
Cabe destacar que aunque no se presenten algunas de estas condiciones, una embarazada puede llegar a tener diabetes gestacional, por lo que siempre hay que chequear con un médico. Y una vez confirmado el diagnóstico por el especialista tratante, a través de exámenes específicos, se deben corregir los factores de riesgo de esta condición.
Peligros que existen cuando se padece diabetes gestacional
Los problemas de sufrir esta enfermedad pueden afectar tanto al bebé dentro y fuera del útero como a la madre. Entre ellos, se encuentran principalmente:
• Para la madre: hay posibilidades de padecer preeclampsia o parto quirúrgico.
• Para el feto: puede ocurrir macrosomía, debido al exceso de glucosa en su sistema. Esto causa un crecimiento excesivo y riesgo de problemas respiratorios.
Por otro lado, Dr. Schwartstein aclara: “Algunas personas creen que la diabetes puede traspasarse al bebé, lo que es falso. Sin embargo, sí es factible que exista una transferencia genética a la predisposición de esta condición”.
Además, el diabetólogo de INDISA explica que los bebés de madres con diabetes gestacional poseen mayor riesgo de ser obesos en la niñez y de tener diabetes tipo 2 de adultos, pudiendo generar un problema de salud a largo plazo.
Tratamiento para la diabetes gestacional
La diabetes gestacional tiene un tratamiento multifocal con dieta y ejercicio. Además, debe ser controlada hasta seis meses después del parto, ya que así se podrá tener un adecuado seguimiento de esta alteración metabólica.
También, es importante que las madres que hayan padecido diabetes gestacional tengan presente que después de 20 años, el 80% de ellas se verá expuesta a la posibilidad de ser diabéticas, por lo tanto es fundamental tener claro este diagnóstico en el tiempo.
En el caso de que la madre sufra de sobrepeso, es normal que se recomiende:
• No se debe aumentar más de medio kilo por mes de embarazo: esto se puede lograr a través de una pauta alimenticia y de actividad física guiada por un profesional.
• Solo en algunos casos específicos se utilizan medicamentos. Entre los más comunes, y solo bajo supervisión médica, están los antidiabéticos e insulina, que controla la cantidad de azúcar (glucosa) en la sangre.
Consejos nutricionales para las madres
La nutricionista de Clínica INDISA, Dana Bortnick, puntualiza que lo principal para la dieta es la selección de alimentos, ojalá mejorando siempre la calidad. Además, recomienda incluir:
• Cereales integrales: alimentos multigrano o multisemillas.
• Alimentos bajos en grasa: frutos secos en la porción indicada, pescado, legumbres, carnes magras, queso fresco, yogurt y lácteos descremados.
• Aumentar el consumo de alimentos frescos de frutas y verduras.
Asimismo, aconseja:
• Evitar períodos prolongados de ayuno.
• Planificar las comidas durante el día. Si se sabe que se va a estar fuera de casa en los horarios establecidos para comer, ojalá llevar comida preparada para así no caer en tentaciones y seguir la pauta establecida.
• La recomendación, en general, son 3 comidas principales y entre 1 y 2 colaciones, priorizando alimentos frescos y bajos en grasa y azúcares.
• Evitar el consumo de alimentos que contengan azúcares refinados, como son los productos de pastelería, galletas y chocolates.
• Tratar de no consumir alimentos muy procesados, como embutidos.
Por otro lado, la nutricionista Dana Bortnick indica que “no se recomienda, de ninguna manera, empezar una dieta frente a una diabetes gestacional, o en caso de sospecha, sin ayuda de un profesional, ya que puede causar un déficit de macro y micronutrientes fundamentales para el desarrollo del embarazo, afectando directamente la salud del bebé en formación”.
Por esto, tanto para guías de alimentación como para mantener la diabetes bajo control se debe consultar periódicamente al médico tratante.
Fuente: Extend.