Por Dario Martinez Mojica, experto en comunicaciones empresariales de Motorola Solutions
Octubre, 2022. A raíz de la llegada del COVID-19 el mundo se vio impactado en diversas formas, llevando a las organizaciones a tener que revisar sus modelos de negocio e incluso a tener que reinventarse en algunos casos. Sin embargo, esto también ha representado una gran oportunidad para varios sectores productivos de América Latina, tal es el caso del sector del retail, el cual evolucionó hacia una nueva realidad en la que hoy más que nunca lo que predomina es lo digital.
Y es que según el estudio “Transformación con sentido digital”, desarrollado por Ernst & Young, el 44% de las empresas en Latinoamérica manifiesta que sus juntas directivas ya tienen la transformación digital como un punto prioritario de sus agendas de trabajo y que el 57% de los líderes empresariales de la región ya activaron su proceso de transformación digital a raíz de la pandemia.
La transformación digital se convirtió entonces en una hoja de ruta para sobrellevar las consecuencias del COVID-19 y en este camino sectores como el retail no fueron ajenos a esta nueva realidad. Sin importar si se trataba de una pequeña boutique, un almacén o una tienda departamental, la digitalización le permitió al sector minorista simplificar y agilizar la experiencia de compra, así como contar con un mayor acceso a la información sobre sus clientes y el inventario, con herramientas que permitían hacer consultas online, tener una mejor gestión de stocks, control sobre la ubicación de productos, pagos y facturas desmaterializadas y por supuesto comercio electrónico, entre otras alternativas.
Sin embargo, más allá de esto el retail reafirmó la necesidad de priorizar a su vez la seguridad, entendiendo que la seguridad, la eficiencia y la productividad están profundamente interconectadas. De allí que actualmente el sector no solo cuente con tecnologías que mejoran la experiencia de compra del cliente, pero que además brindan un ecosistema de extremo a extremo que unifica voz, video, datos y analítica para agilizar y garantizar la seguridad de la operación.
Un ejemplo claro de esto son las tecnologías de la radiocomunicación, su ausencia hace que no exista un flujo de información y que no se pueda responder rápidamente por ejemplo a incidentes, eventos, pedidos de clientes y otras situaciones que necesiten atención inmediata. Esto se debe a que los radios ofrecen una forma más rápida y cómoda de comunicarse entre colegas, no necesitan una red de telefonía móvil para funcionar, lo que significa que no hay que preocuparse por costos mensuales de suscripción o por una señal débil que provoque caídas. Además, permiten suprimir el ruido ambiente, garantizando que las personas se escuchen con claridad, incluso en una planta de producción muy concurrida.
Por su parte, el sector comprendió lo importante que resulta el tener un control de los puntos de acceso y pasillos de las tiendas o almacenes, así como de monitorear la seguridad de sus trabajadores y clientes incluso en áreas restringidas o de depósito. Para esto surgieron sistemas de video seguridad que utilizan inteligencia artificial para crear alta visibilidad de las instalaciones, todo en una sola vista. Estos sistemas cuentan con reconocimiento facial para detectar por ejemplo clientes VIP que requieran atención personalizada o para gestionar el acceso a las instalaciones de personas no deseadas utilizando un sistema basado en roles con detección instantánea de personas. A su vez permiten hacer reconocimiento de placas de vehículos, identificar si hay objetos ubicados en lugares inusuales y detectar comportamientos atípicos. De esta manera, estas soluciones permiten centrarse en lo verdaderamente importante, monitoreando la escena al instante y ayudando a tomar decisiones fundamentales que permitan entrar en acción cuando se requiera.
Sumado a esto, todas estas herramientas de comunicación actualmente tienen también la capacidad de interoperar entre sí, es decir que a pesar de ser sistemas que hablan en distintos formatos y lenguajes, les es posible comunicarse entre ellos intercambiando datos de forma instantánea y segura. Para esto, se puede disponer de soluciones como Avigilon Radio Alert, las cuales permiten enviar alertas a los sistemas de radios en forma de mensaje de texto y/o alertas de texto a voz cuando un suceso atípico y de emergencia es identificado por los sistemas de video. Esta integración agiliza las respuestas de los equipos de seguridad en tiempo real y permiten un control mayor de la situación.
Es así como la llegada de la pandemia representó un enorme reto para el sector del retail, en un contexto en donde los comportamientos de compra de los clientes se vieron modificados, sin embargo, esta situación representó una oportunidad para el sector, quien encontró en la digitalización el camino para reinventarse y para inclusive mejorar la experiencia de atención al cliente. La tecnología se convirtió entonces en una herramienta fundamental para detectar, analizar y responder, esto aumentó la seguridad de las instalaciones de tiendas minoristas en toda la región y como resultado se redujeron los tiempos de inactividad y la operación logró mantener su eficiencia.
Fuente: Vía Central.