La utilización de “triquiñuelas” por parte del Gobierno para atentar contra la autonomía de los colegios acusaron este miércoles los diputados José Manuel Edwards (RN) y Jaime Bellolio (UDI). Esto, tras conocer un decreto supremo firmado por el jefe de la División de Educación General, Gonzalo Muñoz, que con fecha 27 de noviembre de este año obliga a los establecimientos confesionales a dejar de impartir clases de religión si es que los apoderados lo solicitan.
Además, el decreto estipula que sean los propios estudiantes, en el caso de la Educación Media, quienes decidan asistir o no a las clases de la religión que imparte el establecimiento.
“A nosotros nos parece que este decreto es un grave atentado en contra de la autonomía de los proyectos educativos y la posibilidad efectiva que tienen los sostenedores, sean particulares subvencionados o particulares pagados, de tener un proyecto educativo sin la injerencia del Estado de Chile”, sostuvo el diputado Edwards.
Del mismo modo, el parlamentario añadió que “esto es tan improcedente como permitirle a un niño que va a un colegio inglés no participar de dichas clases, o a un niño que va un colegio con énfasis deportivo no participar en el deporte; es decir, no participar de la especificidad del proyecto educativo y, por lo tanto, creemos que atenta gravemente la autonomía de los colegios”.
A su turno Jaime Bellolio enfatizó que “cada día que pasa, el Ministerio deja más en claro que no cree ni comparte que haya distintos proyectos educativos”.
“Hoy día existen colegios laicos, colegios religiosos, existen colegios municipales en donde la religión es optativa. ¿Por qué entonces el jefe de la División de Educación General, a través de un decreto, quiere saltarse la Constitución y la ley? Es algo inentendible”, criticó.
Añadió que el Mineduc “desconfía de los padres, desconfía de los profesores, desconfía de la autonomía de las escuelas y a punta de decretos, triquiñuelas, de letra chica, lo que quiere es homologar la educación, es decir, que haya solo un tipo de educación. Le molesta profundamente a este Gobierno el que haya distintos proyectos educativos. No lo quiere. Por eso es que quieren terminar con la educación subvencionada, por eso es que la Ley General hoy día dice que las habilidades son un problema para Chile”.
Finalmente, los diputados comentaron que no descartan la posibilidad de presentar un recurso de protección “para que se respete la autonomía de los colegios y no solamente respecto a las clases de religión, que es una sola materia, sino que a las especificidad que tienen todos los proyectos educativos, que le dan diversidad a nuestro sistema y que permiten que la libertad de enseñanza florezca”.
Fuente: Prensa Diputados UDI