Humberto Verdejo, ingeniero civil eléctrico y académico de la Universidad de Santiago, expuso ante la Comisión de Minería y Energía de la Cámara de Diputados respecto al uso de Gas Natural Licuado (GNL) y la modificación propuesta por el CNE. Ahí demostró sus reparos y cuál debería ser el camino por tomar.
La normativa por parte del Consejo Nacional de Energía que propone reducir la compra de gas natural licuado fue el eje principal de lo expuesto este lunes durante la Comisión de Minería y Energía de la Cámara de Diputados.
Ahí estuvo presente Humberto Verdejo, ingeniero civil eléctrico y académico de la Usach, donde dijo que la modificación propuesta por la CNE impactará los costos de los clientes. “Cualquier restricción que se ponga a la oferta, tendrá impactos. Y si hay menor oferta de GNL, lo que viene es usar diésel, que es más caro y contaminante”.
“Se está proponiendo imponer restricciones –estableciendo cuotas máximas de gas que puede ser declarado inflexible- que, por la lógica en la compra del gas, va a desincentivar la importación de GNL en el sistema. Esto es preocupante en un contexto de descarbonización de la matriz y extremas sequías”, complementó.
Respecto a su visión, una correcta política pública debe beneficiar al sistema en su conjunto, realizando un correcto diagnóstico, evaluación de costos y beneficios e impactos sobre los consumidores. “Lo racional sería mejorar la gestión en el uso de esta materia prima en el sistema y fortalecer el monitoreo del comportamiento de los agentes de mercado”, apuntó durante su presentación sobre la complejidad del almacenamiento y uso de gas natural.
“Evidentemente es preocupante por varios motivos, da la sensación que la objetividad se ha perdido y se están haciendo juicios que no son lo técnicos que uno esperaría. El tema de incorporar mayor riesgo siempre va a implicar un mayor costo, y cómo funciona nuestro mercado, siempre se traspasa al cliente”, señaló.
En ese sentido, el Investigador en Sistemas de Energía Eléctrica, entregó claves de carácter urgente que se deben tomar en medio de este escenario de crisis hídrica. “El GNL es fundamental para el suministro de energía en el corto y mediano plazo. En el contexto actual, las ERNC (Energías Renovables No Convencionales) no pueden asumir toda la demanda del sistema. Los retrasos en la construcción de nuevos proyectos de transmisión y la necesidad de sistemas de almacenamiento masivo son los desafíos de mediano plazo. La incertidumbre que introduce esta normativa podría implicar graves problemas para la operación y seguridad del sistema eléctrico en el corto y mediano plazo. Debe estudiarse con mayor profundidad sus impactos”.
Fuente: Usach.