Para la arquitecta de la Universidad de Santiago, Ginnia Moroni, los problemas en la construcción del puente Cau Cau, en Valdivia, tienen que ver con la mala coordinación, poca fiscalización y deficiente elección de los materiales. Enfatizó que debiesen designarse fiscalizadores permanentes, y no cambiarlos según cada gobierno.
Ante los constantes problemas en la construcción del puente Cau Cau en Valdivia, lo que ha significado una mayor inyección de recursos por parte del Ministerio de Obras Públicas, MOP, la docente de la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Santiago, arquitecta Ginnia Moroni, indicó que los principales problemas que enfrenta la obra tienen que ver con la coordinación, fiscalización y los materiales usados.
Como se conoce, el pasado 4 de abril se esperaba la inauguración del puente Cau Cau en Valdivia, el primero de modalidad basculante del país, sin embargo, el desarrollo de su construcción contó con múltiples problemas que impidieron ese objetivo.
Algunas de las graves situaciones que se produjeron son: la participación de un falso topógrafo que trabajó en la obra, carpetas del puente instaladas al revés, una falla en el sistema de rótulas para la elevación de la estructura y, en los últimos días, se suma un informe emitido por el Seremi de Obras Públicas de Los Ríos, Jorge Alvial, quien confirmó que el puente tiene problemas de diseño y operación.
Visión experta
Ante esta bochornosa situación, la docente de la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Santiago, Ginnia Moroni, manifestó que la suma de los errores que tuvo el puente pasan por un tema en la calidad de los materiales usados, la mala gestión en la coordinación y la deficiente fiscalización del mismo.
Respecto del primer punto, señala que “hay un problema referido a los materiales utilizados, porque lo que se compró no era exactamente lo óptimo. No sé si fue por un tema de disponibilidad en Chile, pero se podría haber adquirido afuera en el caso que no existiera acá”.
“Tenemos que buscar las nuevas tecnología para tener los mejores materiales y eso requiere generar la experiencia. En el fondo, hay mucha gente que está trabajando con tecnología en las mismas universidades, por eso se puede decir que el capital humano existe. Es un tema de asesorarse bien para buscar los recursos necesarios y poder ejecutar ocupando toda la tecnología”, destaca.
Coordinación
En cuanto al problema de coordinación, explica que “se hace imprescindible contar, a lo largo de todo el desarrollo de la obra, con una persona encargada de manera permanente”. Ello, porque la rotación de encargados, según sea el gobierno, de turno provoca discontinuidad.
Por lo mismo, “los errores sistemáticos son atribuibles, en gran parte, a la coordinación entre las diferentes disciplinas involucradas en la obra. Esa es la clave en estos proyectos grandes, porque la coordinación es bien compleja, y los errores justamente pueden ocurrir debido a eso”.
“Quienes llevan adelante la obra, realizan el proyecto, lo diseñan, lo construyen y ejecutan en tiempos diferentes. Eso, porque el diseño se hace en un momento y, luego, pasa un buen tiempo hasta que llega su ejecución. Por lo mismo, eso provoca complicación”, resalta.
Fiscalización
Enfatiza que otro tema que incide en las constantes fallas tiene que ver con la fiscalización, que incluye la coordinación.
“Los que generan el diseño y lo ejecutan, no trabajan en tiempo paralelo; entonces, cuando ya se está ejecutando hay que volver a la gente que hizo el diseño. Por lo mismo, se requiere reforzar una comunicación que no siempre es tan fluida. Si las personas que lo ejecutan conocen bien el diseño del proyecto, lo pueden fiscalizar de mejor manera para que todo se haga sin problemas”.
“Entonces, ocurre un desfase debido a que el diseño ocurre en un tiempo y la ejecución en otro; sobre todo en proyectos que se alargan. Así, la coordinación se va haciendo más difícil, ya que la comunicación entre las distintas personas que actuaron en el proyecto es más compleja”, expresa.
Tiempo de entrega
Respecto del tiempo de entrega, indica que debido al rompimiento de los mecanismos para levantar el puente (que pasó por un problema de ejecución y material), van a retrasar todo, “porque los vástagos y horquillas deben ser remplazados. Y si lo hacen en una parte, lo deben hacer en el resto del puente con el mismo material, para evitar que se pueda romper a futuro”.
Fuente: Comunicaciones USACH.