Considerar el horario preferente para mayores de 60 años, llevar planificada la decisión y mantener todas las medidas de cuidado contra el coronavirus son algunos de los consejos que entrega Felipe Salech, académico de la Facultad de Medicina e investigador del Centro de Gerociencia, Salud Mental y Metabolismo (GERO). Frente al proceso constituyente, el especialista destaca, por otra parte, la necesidad de asegurar instancias de participación democrática para este grupo de la población y “dejar atrás la mirada paternalista, donde un tercero decide por los adultos mayores”.
El Dr. Salech enfatiza que tener las dos dosis de la vacuna contra el COVID-19 no previene el contagio, por lo que invita a mantener todas las medidas de cuidado contra el coronavirus.
En las próximas elecciones del 15 y 16 de mayo, las mesas estarán habilitadas para votar desde las 8.00 hasta las 18.00 horas ambos días. Se podrá elegir el día para sufragar, pero tanto el gobierno como el Servel recomendaron un horario preferente para los adultos mayores de 60 años: el sábado 15, entre las 14.00 y las 18.00 horas.
Sin embargo, a pesar de todas las facilidades que se han dado para que las personas mayores concurran a votar, la deuda con ellos trasciende de este fin de semana, según el médico geriatra e investigador del Centro de Gerociencia, Salud Mental y Metabolismo, Gero, Dr. Felipe Salech.
El médico, quien además es académico de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, entregó su visión sobre el proceso constituyente que tendrá sus elecciones este fin de semana y los cuidados que deben tener los votantes mayores a la hora de acercarse a su local de votación. A su juicio, una de las grandes causas de esta deuda con la población mayor es que este sistema “está diseñado por jóvenes para viejos”, sin considerar el punto de vista de los adultos mayores.
¿Qué otras medidas se deberían considerar para facilitar la votación de los adultos mayores, además de las que ya hay?
En países como España se recomienda —aunque no solo a los mayores— llevar planificada la decisión. Esto es no elegir dentro de la cámara, si no tener ya pensado a quien se eligió, con el fin de minimizar el tiempo en el lugar de votación.
¿Qué deudas existen con los adultos mayores que no podrán votar por dificultades de traslado?
Pienso que es una deuda que va mucho más allá del día de elecciones. En materia de salud por ejemplo puedo ver como diariamente cientos de pacientes mayores que no pueden asistir periódicamente a controles médicos o programas de rehabilitación por problemas de transporte.
¿Qué cambios deberían ocurrir para mejorar la participación de adultos mayores en los sufragios?
Como una opinión personal, pienso que en el futuro el voto electrónico será la regla, y el envejecimiento de la población no debe ser visto como una limitante. Al contrario, existen antecedentes que afirman que la adaptación al uso de tecnologías por parte de los mayores es buena si se implementan de manera apropiada, con metodologías de accesibilidad. En ese mismo sentido, las tecnologías pueden ayudar a facilitar brechas de acceso y otras dificultades que enfrentan algunos mayores
En la próxima Constitución, ¿qué temas se deberían abordar en materia de derechos hacia el adulto mayor?
Lo central es la participación de las personas mayores. Debemos dejar atrás la mirada paternalista, donde un tercero decide por ellos, y asegurarles espacios de participación. Cuando un joven piensa en la jubilación, lo ve como algo “futuro”, “probable”. En cambio, cuando un mayor piensa en ella es algo presente y real. Esa diferencia genera una brecha gigantesca en la urgencia y priorización. Para mí no es difícil plantear que parte del problema de los sistemas actuales de pensiones están en que son diseñados “por jóvenes para viejos”.
Recomendaciones para el votante adulto mayor
De acuerdo a las estadísticas del Servel, aproximadamente el 11,9 por ciento de las personas habilitadas para sufragar son adultos mayores, aunque el porcentaje de participación se encuentra a la baja durante las últimas elecciones. Actualmente, existe la posibilidad de votar con asistencia de una persona, en caso de tener dificultades para marcar su preferencia, pero aún existe una deuda con ellos en este tema, según Salech.
Para los comicios de este 15 y 16 de mayo, el Dr. Salech enfatizó en primer lugar que tener las dos dosis de la vacuna contra el COVID-19 no previene el contagio, por lo que invita a mantener todas las medidas de cuidado contra el coronavirus. “Es muy importante respetar el uso correcto de mascarillas —además de llevar una de repuesto—, cuidar la higienización de manos, mantener distanciamiento y llevar su propio lápiz pasta azul”, explicó Salech.
De acuerdo a lo informado por el gobierno y el Servel, se estableció un horario preferencial para que los adultos mayores concurran a votar. Esta fecha es el sábado 15 de mayo, entre las 14:00 y las 18:00. Sin embargo, si van a sufragar en otro horario tendrán preferencia para entrar y votar de la forma más expedita posible.
“Entre los consejos que no siempre se entregan están el hablar poco mientras se usa la mascarilla, pues el movimiento del mentón la baja de la nariz y obliga a tomarla con las manos para volver a posicionarse”, añade el médico e investigador de Gero. Además, Salech recuerda a la población adulta mayor que si ven personas con la mascarilla mal puesta, es preferible alejarse de ellas. “Estamos acostumbrados a que las votaciones sean una fiesta de la democracia, pero en esta oportunidad la idea es ‘ir-votar-salir’”, concluyó el geriatra e investigador.
Fuente: U. de Chile.