El senador Guido Girardi, junto a la Corporación Miles y el Colegio de Matronas, exigió al Gobierno poner urgencia al proyecto de despenalización del aborto en tres causales y, en el caso de violación, reponer la confidencialidad y aumentar a 18 semanas el plazo de interrupción.
El senador Guido Girardi pidió al Gobierno poner urgencia al proyecto de aborto en tres causales, que está semana fue aprobado en la Comisión de Salud del Senado y pasó a la Comisión de Constitución, argumentando que el presidente de dicha instancia (Pedro Araya DC), señaló que la iniciativa no se tramitará este año sin la urgencia del Ejecutivo.
“Este proyecto se aprobó en la Comisión Salud con los votos de tres senadores que estamos por el derecho a decidir y que las victimas no vayan a la cárcel. Ahora pasó a la Comisión Constitución y el propio presidente ha dicho que si el gobierno no le pone no se va a tramitar”, señaló el parlamentario.
Girardi agregó que “quiero plantearle al Ejecutivo que esto es parte del programa de gobierno y hay un compromiso que se va a resolver este año. A inicios del 2014 nos pidieron que bajáramos el proyecto que teníamos en tabla en la Comisión y lo hicimos. Ahora, dos años después, no estamos dispuestos a seguir dilatando la discusión”.
Para Girardi “el Gobierno no puede ser cómplice de los conservadores que quieren impedir el derecho a decidir y encarcelar a las mujeres víctimas. Por lo tanto exigimos que le ponga urgencia para que se cumpla la palabra empeñada de que el trámite legislativo va terminar este año”.
El congresista afirmó que en el caso de violación es necesario incluir la confidencialidad -“si a la mujer la obligan a denunciar, por miedo o porque fue algún cercano, muchas no lo van a hacer”- e incrementar hasta 18 meses el plazo de interrupción “muchas niñas esconden la gravidez porque el violador es el tío el padrastro, el hermanastro, incluso algunas tienen el parto a escondidas”.
Para Girardi, “lo esencial es que el gobierno no sea cómplice y ejerza liderazgo en un tema que es mayoritario en la sociedad. Para mucha gente la política es irrelevante porque no se discuten los temas que en verdad le importan a todos”.
NO ES INCONSTITUCIONAL
La directora de la Corporación Miles, Claudia Dides, señaló que “llevamos 27 años esperando reponer el aborto terapéutico más la causal de violación” y agregó que le parecía “inconcebible que un senador de la República ponga condiciones para debatir el proyecto en la Comisión Constitucional”.
Para Dides, los cuestionamientos constitucionales al proyecto no tienen asidero real, “entre 1980 -cuando la Constitución establece el derecho a la vida del que está por nacer- hasta que se derogó en 1989, el aborto terapéutico se aplicó muchas veces”.
Según la directora de Miles, el actual Gobierno debe cumplir la responsabilidad que asumió, “Chile es cuestionado por la Corte Interamericana, convenciones y tratados internacionales de derechos humanos, por ser uno de los siete países del mundo que penaliza el aborto. Aunque no presas, actualmente hay mujeres imputadas por esa causa”.
La directora de Miles afirmó que “el Estado no protege la maternidad, que no es sólo un buen embarazo sino también dar las herramientas necesaria para tomar una decisión informada y responsable”.
La dirigenta de la Federación Nacional de Profesionales Universitarios de los Servicios de Salud (Fenpruss), Selma Núñez afirmó que “estamos por recuperar un derecho perdido en dictadura y que genera una gran discriminación: las mujeres con recursos interrumpen su embarazo en clínicas privadas o en el extranjero; las pobres abortan clandestinamente y se arriesgan a morir o ser penalizadas”.
Núñez exigió que “los parlamentarios ejerzan el mandato ciudadano recibido y el 70% de chilenos y chilenas aprueban el proyecto de despenalización de aborto en estas tres causales”.
TRAFICO DE MISOTROL
Lina Córdova, representante del Colegio de Matronas y Matrones de Chile, señaló que “siempre hemos apoyado la despenalización del aborto porque es devolverle a las mujeres un poco de sus derechos sexuales y reproductivos que en este país no pueden ejercer plenamente porque un grupo conservador se niega a avanzar”.
Córdova agregó que “a nadie se le obliga a abortar, pero si decide por esa opción debe ser con la mayor seguridad sanitaria. Hoy, en nuestros recintos de trabajo, somos testigos de las consecuencias del increíble y desinformado tráfico misotrol a través de las redes sociales”.
Fuente: Prensa Girardi.