Puede sonar redundante, pero no lo es. Cada vez pasamos más tiempo en Internet, porque cada vez más tareas de la vida diaria se pueden llevar a cabo de modo “virtual”. Pero hubo un tiempo diferente en el cual las cosas se hacían a la antigua usanza: la cartola del banco la consultábamos en la sucursal, y nos cuidábamos de que nadie viera nuestros números; teníamos fotos y las enseñábamos sólo a los más cercanos, no a cualquier vecino copuchento; cuando veíamos un sitio oscuro y sospechoso, ni dudábamos en que no había que entrar; si alguien nos dejaba una carta mínimamente dudosa en el buzón… ¡sospechábamos de inmediato! Y esa misma conciencia de autocuidado es la que los usuarios necesitan hoy en el mundo online.
Sigue los “Securitips”, consejos de seguridad de Google
Este 10 de febrero se celebra mundialmente el Día del Internet Seguro, cuyo objetivo es promover un uso de la web responsable y seguro. Por esta razón, desde Google Chile recomendamos tomar diferentes medidas en dos categorías:
Prevención propia: Privacidad y seguridad
- Protege tus contraseñas: No utilices las mismas contraseñas para tus datos importantes (banco, correo electrónico, pantalla de bloqueo de tus dispositivos). Es ideal que sean largas e incluyan números, letras, símbolos, mayúsculas y minúsculas. Si necesitas ideas para crearlas, te sugerimos lo siguiente: escribe una frase al azar, por ejemplo “La casa de Emilio y Fran termina en 7”. Ahora elige la primera letra de cada palabra: LcdEyFte7. Ésta es una contraseña que difícilmente los ciberdelincuentes podrán descifrar.
- Configura las opciones de recuperación de tu contraseña: Dejar la llave de la casa adentro, es francamente desalentador. Si olvidas la clave de tu correo electrónico, el cerrajero perfecto es tu dispositivo móvil. Tener un número asociado a tu cuenta es una de las formas más fáciles y confiables de ayudar a mantener tu cuenta segura ante posibles intrusos, y de poder volver a “abrir la puerta”.
- Sal de tu cuenta, un ingrediente principal: Después de acceder a tus servicios personales, sobre todo cuando utilizas computadores públicos, a los que tienen acceso otras personas, es muy importante que te asegures de cerrar la sesión de correo, de YouTube, de Redes Sociales… Si cierras el navegador pero no tus cuentas, quedarás expuesto a que otros vean tu información personal y que puedan hacer mal uso de ella.
- Controla que no haya actividades o accesos inusuales a tu cuenta: Haz clic en el apartado “Información detallada” ubicado en la parte inferior de tu Gmail. Aquí encontrarás las direcciones IP más recientes desde las que se accedió a tu correo electrónico y sus ubicaciones asociadas. ¿Ves algo que sea sospechoso? Cambia la contraseña inmediatamente y sal de la cuenta.
Además, cuando accedas al servicio, revisa la dirección web para asegurarte de que empiece con https:// (y no solo “http://”).
- Usa redes seguras: Ten mucho cuidado al utilizar redes wi-fi que no conoces. El proveedor del servicio puede controlar el tráfico de la red, entre ello, gran parte de tu información personal. Esto no ocurre por ejemplo con tus datos de Gmail o de Google Drive. Recomendamos evitar realizar actividades importantes, como transacciones bancarias o compras en Internet, cuando utilices redes públicas.
Respecto a tu red doméstica, establece tu propia contraseña para proteger el router, cambiando la que venía predeterminada con el mismo, que tal vez los piratas informáticos ya conocen. Y haz lo mismo con tu señal Wi-Fi, para evitar que personas ajenas la utilicen.
- Bloquea la pantalla de tu smartphone o tablet: De la misma forma en que no dejas las puertas de tu auto abiertas después de estacionarlo, no dejes que cualquier pueda meterse en tus dispositivos.En muchas computadoras, puedes bloquear la pantalla en las preferencias del sistema. En los teléfonos o tablets, puedes hacerlo con un PIN o con un patrón para agregar una capa adicional de seguridad a tus datos, y en algunos, incluso, puedes bloquearlo con tu cara.
- Dispositivo limpio… Hay algunas pistas cuando un equipo está infectado con software malicioso: funciona lento, aparecen pantallas aleatorias, recibes cargos aleatorios en tus cuentas bancarias… Para prevenir, sigue pasos como el de mantener el sistema operativo y el navegador actualizados.
- Una capa de seguridad adicional para tu cuenta Google: Habilita la verificación en dos pasos. El acceso a tu cuenta funcionará de una forma nueva: tras ingresar tu cuenta, se te pedirá algo más, un código que se envía a tu celular. Así que si un desconocido trata de entrar a tu cuenta, no podrá hacerlo al faltarle el segundo código. Ahora puedes protegerte con algo que conoces (la contraseña) y algo que tienes (el teléfono)
- Ubica tu dispositivo remotamente por si te lo roban o lo pierdes: A pesar de que nuestros dispositivos se han convertido en extensiones de nosotros mismos, a veces tenemos la mala suerte de olvidarlos encima de una mesa, en un taxi… o peor, sufrir un robo. El Administrador de dispositivos Android puede ayudarte a encontrarlo, a bloquearlo o a borrar tus datos. Este se puede activar desde la pestaña Seguridad en Ajustes de Google, desde android.com/devicemanager, o descargando e instalando la aplicación Administrador de dispositivos Android desde Google Play Store.Con esto podrás localizar el dispositivo en una ubicación aproximada, hacerlo sonar, bloquearlo o borrarlo de forma remota cuando esté conectado a Internet.
Otro dato importante es que si te robaron, no debes intentar recuperarlo por ti mismo. Lo adecuado es acudir a la policía.
Evitando los delitos informáticos
- Evita trampas: Muchas veces Internet es un lugar de fantasía, donde lo imposible es posible en un par de clics. Sin embargo, así también aparecen los ciberdelincuentes, de quienes nos podemos defender siguiendo varios tips sencillos.
- No hagas caso de los extraños que te ofrecen regalos, te aseguran premios, y de quien te pide datos personales.
- Investiga más sobre las ofertas y descuentos que parecen “increíblemente atractivos”.
- Si tienes dudas, ve a lo seguro. Haz clic en anuncios o compras de productos en sitios que sean seguros, estén verificados y en los que confíes. Muchas plataformas de compra en línea tienen programas de comerciantes o vendedores confiables, con sellos de certificación. Busca esos sellos, y si no lo tienen, sondea el número de opiniones que hay acerca del vendedor y lo que dicen las mismas.
- Evita el robo de identidad: Si un gran amigo o un familiar cercano te habla por chat, o te manda un mensaje desde su cuenta, pidiéndote ayuda, siempre debes mantener la calma y asegurarte de que no se trata de un intruso que está suplantando la identidad de esa persona. Y es que el “cuento del tío” tiene también versión online. Por eso, no respondas si ves un mensaje de correo electrónico sospechoso, un mensaje instantáneo o una página web que solicita tu información personal o financiera: nunca ingreses tu contraseña cuando llegues a un sitio mediante un vínculo en un correo electrónico o un chat en el que no confías; no envíes tu contraseña por correo electrónico ni la compartas con otros; y denuncia trampas y correos electrónicos sospechosos.
Para que todos estos consejos sean válidos, debes preocuparte siempre de autocuidarte en Internet. No andes esperando a conocer un caso de estafa cercano a tu círculo, o a que sea de nuevo el Día de Internet Seguro. El autocuidado es una herramienta disponible para todos los dispositivos del mercado, que funciona en todos los servicios de correo, navegadores, es gratuito, y nunca queda desfasado.
Para más información, visita y comparte el Centro de Seguridad de Google online
Fuente: E-press.