Informe de expertos de Naciones Unidas advierte necesidad de limitar el calentamiento global en 1,5°C en lugar de 2°C para así evitar impactos catastróficos en la vida de las personas y el medioambiente. Para llegar a la meta planteada por los científicos el consumo mundial de carbón tendrá que reducirse en dos tercios para 2030 y caer hasta casi cero para 2050. También, para el 2030, el uso de petróleo deberá reducirse a la mitad y el de gas en un tercio. La protección de océanos y bosques también resultan claves. “El desafío es enorme, pero debemos entender lo crucial del momento que vivimos”, dice Amanda Starbuck, directora de campañas de Greenpeace Andino.
Fotos: http://fotos.greenpeace.org.
Santiago, 9 de octubre de 2018.-
Como “una enorme oportunidad para cambiar la forma en que hemos estado afectando la salud del planeta y así evitar un daño irreversible” calificó Greenpeace las conclusiones del informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático de las Naciones Unidas (IPCC por sus siglas en ingles), quienes plantearon la necesidad urgente de limitar el aumento de la temperatura a 1,5°C, en lugar de 2°C para así evitar una debacle en el clima del planeta.
Para los científicos reunidos en Corea del Sur, los efectos del cambio climático –como el aumento de fenómenos extremos, disminución de hielo en los polos e incremento en el niveles del mar– han estado directamente relacionadas con las emisiones de gases de efecto invernadero vinculadas con la acción del hombre, lo que ha llevado ha generado un aumento de un grado centígrado en la temperatura del planeta respecto de lo que existía previo a la era industrial.
“A este ritmo, y sin un cambio importante en la forma en que nos estamos comportando, es casi una ilusión que se cumpla el plan de quedar por debajo de los 1,5 grados en 2100, que era el objetivo central del Acuerdo de París. De hecho, si es que seguimos es ruta de de reducción de emisiones, la temperatura del planeta aumentará tres grados a finales del siglo. Así las cosas, es hora de preguntarse si estamos dispuestos a asumir los efectos e impactos de nuestra inacción. Es necesario entender que apenas queda un pequeño margen para detener una catástrofe climática. El tiempo se agotó”, señala Amanda Starbuck, directora de Campañas de Greenpeace Andino.
El análisis de los científicos es claro: para evitar una catástrofe se requieren transformaciones rápidas, urgentes y profundas. Y en todos los campos: electricidad, agricultura, las ciudades, el transporte y la industria. Así, por ejemplo, para alcanzar el objetivo de 1,5 ºC, las emisiones de dióxido de carbono (el principal gas de efecto invernadero) deben reducirse a la mitad en los próximos diez años y llegar a cero en 2050. Para 2030, el consumo mundial de carbón tendría que reducirse en dos tercios, el de gas un tercio, el de petróleo en un 40%, y las energías renovables deberían aportar el 60% de la electricidad.
“Es claro que el desafío es enorme, pero debemos entender lo crucial del momento que vivimos. Estamos justo a tiempo para cambiar las cosas. Más que lamentarnos, debemos reaccionar”, advierte Amanda Starbuck.
“Para Chile el informe de Naciones Unidas resulta clave, ya que nuestro país ha sido considerado como uno de los diez más afectados del mundo por los efectos del cambio climático. Es necesario, por ejemplo, que se abandone el carbón y la producción con energías sucias. El potencial en energías renovables de Chile hace ilógico que el gobierno continúe con una matriz energética que hoy destruye ecosistemas, genera zonas de sacrificio como la de Quintero-Puchuncaví y, además, colabora al escenario de calentamiento global. Se hace urgente la transición a energías renovables y limpias. Esperamos que una respuesta del gobierno ante este informe tan preocupante para el futuro del planeta, ya que es claro que debemos acelerar y profundizar nuestras medidas de mitigación ante el cambio climático”, plantea Matías Asun, director nacional de Greenpeace en Chile.
Efectos de un aumento de temperatura de no más de 1,5 grados:
1. Reduce un 50% el porcentaje de gente expuesta a escasez de agua.
2. La elevación del nivel del mar sería 10 cm menor que en un escenario de 2°C.
3. Tendría chance de sobrevivir el 10% de los arrecifes de coral, mientras que bajo un escenario de 2°C el 99% se perderían.
4. El Ártico quedará libre de hielo marino en verano solo una vez por siglo y no una vez cada década como sería bajo 2°C.
5. Se limita el aumento en la temperatura y acidificación de los océanos, así como el consecuente riesgo de pérdida de biodiversidad marina.
Generación energética global al 2030 para cumplir meta de aumento de no más de 1,5 grados:
1. El carbón debería reducirse casi dos tercios y ser eliminado en 2050.
2. El petróleo debería decrecer un 40% y un 90% a mitad de siglo.
3. Las energías renovables deben crecer hasta representar el 60% de la generación eléctrica global. Y ser el 75% para el 2050.