- La primera producción audiovisual de Greenpeace, en alianza con History Channel, navega junto a Carolina Arregui y Benjamín Vicuña por las prístinas aguas de la Patagonia Chilena para conocer toda su riqueza y biodiversidad.
- El documental muestra el contraste entre áreas realmente protegidas, como el Parque Nacional Torres del Paine, donde la biodiversidad está a salvo, y el Parque y Reserva Nacional Kawésqar, actualmente sometidos a la contaminación y daño de la industria de la salmonicultura.
28 de septiembre de 2022 – En el Teatro San Ginés y junto a personalidades de distintos ámbitos, la ONG Greenpeace Chile realizó el lanzamiento de su documental “Por aquí no”, trabajo audiovisual que muestra el viaje que los actores Benjamín Vicuña y Carolina Arregui encabezaron a la Patagonia chilena en la Reserva Nacional Kawésqar, ubicada en la Región de Magallanes, para dar a conocer la necesidad de proteger esa zona de la industria salmonera.
Al estreno, que contó con ambos rostros, también asistieron la directora ejecutiva de Greenpeace Argentina, Chile y Colombia, Natalia Machain; el director de Greenpeace Chile, Matías Asún; y Lucas Rojo, director de producción Original para History Channel Latinoamérica, junto a personalidades del mundo artístico y audiovisual.
Respecto a su participación en el documental, el actor Benjamín Vicuña, señaló que: “fue una experiencia muy enriquecedora. Ir hasta el lugar y ver la belleza del sur de nuestro país, conocer los paisajes únicos que nos pertenecen y que no deben ser amenazados por el cultivo de salmones. Conocer tradiciones ancestrales como el tejido Kawésqar. Hoy más que nunca necesitamos proteger estos lugares únicos”.
Esta iniciativa audiovisual se enmarca dentro de la campaña de protección de los mares patagónicos que Greenpeace ha llevado durante años, que busca preservar estos ecosistemas únicos y denunciar aquellas actividades que los ponen en riesgo. Hoy busca visibilizar los impactos de la industria de la salmonicultura en la Región de Magallanes, particularmente dentro de la Reserva Nacional Kawésqar que se encuentra bajo amenaza.
“Ojalá con esta campaña, se tome conciencia y logremos prohibir la instalación de la salmonicultura en las aguas de la Reserva Nacional Kawésqar. Es importante que esos mares maravillosos estén protegidos para que no existan más proyectos salmoneros en ese lugar que alberga un hábitat maravilloso de especies únicas en el mundo”, enfatizó la actriz Carolina Arregui.
El director nacional de Greenpeace Chile, Matías Asun, indicó que “detener la expansión de la industria previene que se afecten de manera irreversible la naturaleza y medio ambiente, además de actividades locales como la pesca artesanal y el turismo. Con este documental, queremos que las aguas de la actual Reserva Nacional Kawésqar sean incluidas dentro del Parque Nacional Kawésqar, que ningún proyecto de salmonicultura más sea aprobado en la actual Reserva Nacional Kawésqar y se ponga freno inmediato a la expansión de la industria en la Patagonia chilena”.
Hoy existen 67 concesiones otorgadas y 64 en trámite en el área de la reserva, que corresponden a las aguas del Parque Nacional Kawésqar, que quedaron fuera del parque por el lobby de la industria salmonera. Este caso es un gran ejemplo de diversos ecosistemas patagónicos amenazados por la industria, aseguran en Greenpeace.
El documental será exhibido gratuitamente el día 28 de septiembre a través del canal oficial de Greenpeace Chile en YouTube (Trailer Por Aquí No) y a través de las pantallas de History Channel, el 6 de octubre a las 22:00 (Hora Chile).
NOTAS AL EDITOR
Impactos de la industria
Los impactos del cultivo del salmón son diversos y están documentados por diferentes artículos e investigaciones científicas. Están asociados, principalmente, a la afectación directa del ecosistema marino. Las distintas crisis ambientales que ha vivido Chile (segundo productor de salmones a nivel mundial) han evidenciado y demostrado cómo la salmonicultura destruye el medio ambiente de manera muy agresiva. Un ejemplo, es la contaminación de las aguas, el potencial desarrollo de floraciones algales nocivas (marea roja), la pérdida parcial y total de oxígeno en el mal y el daño indirecto y directo a la biodiversidad, entre otros. Muchos de estos daños pueden tardar décadas en ser reparados e incluso pueden ser irreversibles.
El desarrollo de salmonicultura (es decir, la cría intensiva e industrial de salmones) en zonas donde los salmónidos no son nativos y existen ecosistemas de alto valor y fragilidad como los mares patagónicos, tiene graves impactos ambientales que no son posibles de evitar. Prueba de ello, es que Chile, que tiene un desarrollo de más de 30 años de salmonicultura y regulaciones específicas para esta industria (las cuales han mejorado estándares en los últimos años), continúan siendo foco de desastres ambientales provocados por la industria mes a mes.
Greenpeace Chile, por primera vez y en el año que conmemora tres décadas en el país, presentó su primer documental, grabado en la Región de Magallanes, donde la industria salmonera se ha instalado, amenazando indiscriminadamente los ecosistemas, la diversidad y el territorio kawésqar. En su recorrido, se puede ver el contraste entre áreas realmente protegidas -como el Parque Nacional Torres del Paine, donde la biodiversidad está a salvo- y otras áreas protegidas, como el Parque y Reserva Nacional Kawésqar, que están sometidos a la contaminación y daño de la industria de la salmonicultura.
Fuente: Greenpeace.