Tras dos años de campaña, Greenpeace celebra una de sus más claras victorias en la lucha por defender el medioambiente: La eliminación total de las bolsas plásticas en Chile. Greenpeace inició su trabajo para eliminar las bolsas plásticas en diciembre de 2017 al montar un árbol de navidad afuera de un centro comercial invitando a la gente que desembolsara sus compras navideñas y dejara la bolsa plástica en el árbol. En cuatro días se reunieron más de 5 mil bolsas plásticos iluminadas en el centro de la capital.
“Esto es un primer avance contra la pandemia del plástico que revela que sí es posible eliminar los productos plásticos innecesarios. En Greenpeace estamos muy contentos y orgullosos con esta primera victoria de nuestra lucha por eliminar el plástico. Creemos que el crecimiento de la producción de plásticos y el rol que ha alcanzado en la generación de una crisis de contaminación en los ecosistemas sólo puede enfrentarse cambiando nuestra perspectiva de cómo consumimos y este es un gran primer paso”, explicó, Soledad Acuña, vocera de Greenpeace Chile.
Al igual que en el resto del mundo, las bolsas plásticas se introdujeron al país en los años 70 como una forma de facilitar el transporte de productos, principalmente en el retail. En 2017 la organización ambientalista inició la campaña #desembolsate donde concentró sus fuerzas en detener el uso de bolsas plásticas del país para que no fueran eliminadas sólo en las comunas costeras, como era el proyecto inicial, sino que se extendiera a todo Chile.
“En la campaña “desembolsate” armamos el árbol de Navidad más grande de Chile solo con las bolsas que los transeúntes nos entregaron cuando les pedimos que redujeran sus bolsas de compras navideñas. Varios las colgaron alcanzando a juntar 5 mil bolsas plásticas de navidad en 4 días. Luego en el verano nos sumergimos en el océano para mostrar el plástico en el fondo marino, también denunciamos la farsa de las cadenas de supermercados que entregaron bolsas que contenían plástico bajo el nombre de reutilizable y luego desplegamos un banner gigante en forma de bolsa plástica en uno de los retails más importantes del paí.a De esta manera, gracias estas acciones junto a las 70 mil personas que adhirieron a nuestra campaña hoy celebramos el fin de las bolsas plásticas en todos los comercios”, agregó Acuña.
Desafío plástico
Chile es el primer país en eliminar las bolsas plásticas en Latinoamérica pero también es el país que tiene una cifra récord: alcanza el primer lugar en la generación de basura plástica por habitante en el continente, explican en la organización.
“Somos un diamante en bruto en la eliminación de plásticos. Somos los primeros en eliminar las bolsas en América Latina. Por eso y no solo las empresas, sino la ciudadanía tienen un enorme potencial de participación social para generar, comprar, y almacenar elementos que reemplacen el plástico en su vida cotidiana. El uso innecesario de plástico es cosa del pasado, entramos en la fase de las personas y el planeta donde la gente ha tomado conciencia de la importancia de eliminar este elemento para poder dejar un medioambiente mejor a los que vienen”, enfatizó Greenpeace.
En este contexto, la organización intensificó su trabajo para eliminar la avalancha de productos plásticos en Chile. Con esto han buscado dejar su huella identitaria respecto a la necesidad de tener un #chilesinplasticos.
“La presencia de plásticos en los océanos es un problema que crece a gran velocidad a la vez que aumenta vertiginosamente su producción global. Se estima que en 2020 esta producción superará los 500 millones de toneladas anuales, lo que supondría un 900% más que los niveles de 1980. Si los residuos plásticos no son correctamente gestionados o directamente se abandonan pasan a contaminar el medio terrestre y muchos llegan a los océanos a través de las vías fluviales”, explica Acuña.
Como desafío Greenpeace explica que es hora que el Gobierno pueda agilizar y acelerar la transformación a un modelo de gestión del plástico cuyo norte sea reducir. “Recordemos que el reciclaje es insuficiente para lograr acabar con la crisis en la magnitud actual. Menos del 12% del plástico se ha reciclado en Chile, por lo que estamos lejísimos de una meta satisfactoria a la altura de la urgencia del desafío, sin contar las dificultades que tienen los gobiernos locales para lograr aumentar el reciclaje”. Por eso, si existen alternativas, la solución es eliminar y reducir su consumo. El mejor plástico es aquel que no se usa”, enfatizaron desde la organización ambientalista.
Fuente: Greenpeace