- El encuentro organizado por la Asociación Chilena de Desalación y Reúso, ACADES, comenzó con un panel de conversación donde se analizó la relación entre seguridad hídrica, crecimiento económico y permisología.
- Al evento también asistieron empresas de la industria minera, sanitaria y tecnológica, como SQM Yodo Nutrición Vegetal, Aguas Pacífico, BHP, Colbún, Aguas Nuevas, entre otras.
Este martes se realizó la segunda Rueda de Negocios organizada por la Asociación Chilena de Desalación y Reúso, ACADES, instancia para acelerar el desarrollo de proyectos de inversión y negocios en el sector de producción de agua, elemento que resulta clave como habilitador del crecimiento económico del país. A la actividad asistieron representantes de las 81 empresas socias, como SQM Yodo Nutrición Vegetal, Aguas Pacífico, BHP, Colbún, Aguas Nuevas, Transelec, Engie, entre otras, que participaron de sesiones privadas con las demás empresas socias del gremio, con el fin de fomentar el desarrollo de proyectos y la sostenibilidad de la industria.
La actividad se inició con una conversación con el ex ministro de Hacienda y presidente de Horizontal, Ignacio Briones, y el presidente de ACADES, Carlos Foxley, en la que se abordó la relación entre la seguridad hídrica y el crecimiento del país. Briones explicó que “vamos a necesitar agua en Chile, que son mega inversiones, que generan crecimiento, trabajo y agua para las comunidades aledañas (…) Si tú te quedas sin agua y hay actividades que dependen de ella, esas actividades van a sufrir y habrá menos crecimiento del que ya tenemos. Por otro lado, si tú eres capaz de habilitar nuevos usos de agua que lleguen a fuentes productivas, va a haber más crecimiento económico. Asegurar el agua es fundamental, y la desalación, dado que Chile tiene 4.000 kilómetros de costa, tiene oportunidades y capacidades estructurales extraordinarias para habilitar una industria que está naciendo, creciendo y que será una parte importante del camino productivo”.
Por su parte Carlos Foxley enfatizó en la importancia de agilizar soluciones de desalación, en particular para la región de Coquimbo. “Revisen lo que está pasando en Bogotá, capital de Colombia, un país con una economía muy sólida y que, sin embargo, cada 10 días se le va a cortar el agua a cada hogar. Si llegamos a una situación parecida en La Serena, en Coquimbo, eso significa que los restaurantes van a tener problemas para abrir en la Avenida del Mar, que los departamentos un día a la semana van a tener restricciones de agua, por lo cual no funcionan los baños, no funciona la cocina, los colegios, o sea, esto tiene repercusiones en la vida diaria tremendamente significativas”.
La permisología fue identificada como uno de los grandes desafíos a sortear para el desarrollo de la industria dado que está actuando como una traba para las inversiones. El exministro Briones indicó que “sabemos que hoy día una planta desaladora, en permisos varios, puede demorarse 8 o 10 años, tal vez más según la Comisión Nacional de Productividad. La permisología es un impuesto muy grande y directo a la inversión. En la Comisión Marfán lo medimos (…) estimamos que esto equivale a casi cuatro puntos de impuesto corporativo en términos financieros”. Y agregó: “los permisos de las plantas desaladoras deben ser urgentes, hay que simplificar ese proceso sin sacrificar estándares ambientales, ésa es la clave, y se puede. Creo que ese es un camino en el que Chile ya está encaminado y hay que construir una verdadera política de Estado.”
Por su parte, Carlos Foxley advirtió que “la inversión está muy activa, hay mucho interés, pero al mismo tiempo hay mucho cuestionamiento, un poco a tratar de entender por qué en Chile, siendo tan necesario y teniendo tan buenas condiciones, aun así los proyectos se demoran o tienen más trabas en comparación a otros países”. Agregó que “debemos tener un marco regulatorio y el proyecto de ley de desalinización tiene aspectos que hay que mejorar”.
Javier Moreno Hueyo, gerente general de Aguas Pacífico, también se refirió a la demora en la tramitación de proyectos y sus implicancias: “No puede ser que un proyecto de desalación con el nivel de urgencia que tenemos se esté demorando 10 años en poder ser construido”. En tanto, Julio Ibáñez, gerente de Proyectos de SQM Yodo Nutrición Vegetal, puntualizó que “hay una incertidumbre de cuánto va a llegar a costar y de cuándo lo va a tener habilitado. Entonces, es muy difícil para el inversionista involucrarse en un proyecto que no tiene ni plazo ni presupuesto”. Para Sergio Fuentes, gerente corporativo de Desalación y Reúso de Aguas Nuevas, el foco en lo regulatorio debe estar en “cómo hacemos un sistema ágil que permita construir desaladoras cuando son necesarias, sin perder de vista el objetivo final que es agua para la población, para la industria y para el crecimiento de Chile”.
Otro de los aspectos relevados fue la importancia de soluciones hídricas sustentables en lo social y ambiental. Moreno explicó que “en la zona central, la respuesta sustentable son los proyectos multipropósito, que permiten abordar de manera integral las necesidades de diversos actores en regiones con alta densidad y escasez de territorio”. Un ejemplo de esto es la Planta Desalinizadora de Aguas Pacífico que “permitirá sumar una nueva fuente de agua no continental, permanente, segura y sustentable al balance hídrico de la cuenca del Aconcagua, favoreciendo la adaptación a la crisis climática; y, al mismo tiempo, priorizando el uso de aguas continentales para consumo humano por sobre la actividad productiva, beneficiando a sus habitantes y el medio ambiente“.
Otro ejemplo es lo que está realizando el sector minero en eficiencia hídrica. SQM Yodo Nutrición Vegetal, por ejemplo, se autoimpuso un ambicioso plan para reducir el consumo de agua continental a su mínimo nivel y reemplazarla por agua de mar. Julio Ibáñez explica que “para llevar a cabo este compromiso, estamos con el proyecto “Tente en el Aire”, asociado a la faena Nueva Victoria de SQM, en la región de Tarapacá que duplicará la capacidad de producción de yodo a 23.000 toneladas anuales, sin uso de agua continental ni generar residuos, abasteciendo el consumo humano de comunidades en el entorno”.
Asimismo, se relevó el rol protagónico que pueden jugar las alianzas público – privadas para enfrentar la escasez hídrica. Chile ya ha sido reconocido a través del premio Global Water Awards 2022 otorgado a la Planta Desaladora de Caldera, la primera en Chile que está dedicada al consumo humano. Según relata Sergio Fuentes de Aguas Nuevas, “estamos en un escenario donde debemos buscar nuevas fuentes de agua. Esto genera un cambio muy importante en la visión de la región de Atacama hoy, trae certeza para el futuro, para las inversiones, para la población. Así también lo hará el nuevo proyecto que tendremos en la Región de Arica y Parinacota”.
Fuente: Corpo