Las herramientas de trazabilidad que permite la Inteligencia Artificial (IA) elevan los estándares de competencia, transparencia y compliance al aplicarse en los procesos de compra y licitaciones públicas, ya que transparentan y agilizan este vital proceso comercial.
Solo un ejemplo para cuantificar los beneficios de esta implementación son las cifras que la Fiscalía Nacional Económica reveló en su “Estudio de mercado sobre compras públicas”, donde evidenció pérdidas del gasto público en torno al 10% en insumos y servicios para el Estado; además de otras falencias como la falta de apertura a los oferentes (a través de convenios que los excluyen) y especificaciones técnicas que dirigen resultados.
Esto deja de manifiesto cuánto puede ahorrar una industria al incorporar plataformas de inteligencia artificial en sus procesos de compras y licitaciones industriales. Gracias al control y análisis que ejercen sobre la información, las empresas compradoras pueden acceder a un abundante pool de proveedores que a su vez compiten en igualdad de condiciones. De este modo, la tecnología se convierte en aliada para detener y prevenir fraudes o conductas colusorias que a la larga son altamente costosas para el negocio.
Felipe Manterola, socio de wherEX.com