Para los académicos de la Universidad de Santiago, Jaime Retamal y Daniel Ríos, actividades educativas bajo esta modalidad son “irreemplazables”. No obstante, el infectólogo Ignacio Silva opina que el cierre preventivo de colegios por cuarentenas era esperable y anticipa que podría volver a suceder.
Establecimientos educacionales iniciaron el año escolar con horarios y jornadas flexibles, asistencias voluntarias y estrictos protocolos sanitarios. Sin embargo, dos establecimientos de la Región Metropolitana debieron entrar en cuarentena tras descubrirse, el primer día, casos de Coronavirus. El ministro de Educación, Raúl Figueroa, llamó a la población a no ver esto como una mala noticia, pero el Colegio de Profesores manifestó su preocupación por la alta positividad de COVID-19 en el país.
El doctor en ciencias de la educación y académico de la Universidad de Santiago, Daniel Ríos, recordó lo complejo que resultó implementar clases virtuales durante el año pasado en colegios, ya que no todos pudieron tener el mismo acceso a tecnologías.
“Me parece necesario ir avanzando en algunas decisiones que comprometan una mejor formación de los estudiantes. Llega marzo, con toda la experiencia del año pasado, con todas las condicionantes favorables y desfavorables, y con datos de que no hubo un aprendizaje pleno en los objetivos comprometidos en diferentes programas de estudio”, apuntó el académico.
El experto en evaluación enfatizó en la necesidad de regresar a clases en la enseñanza básica y media, además de permitir “la apertura gradual de las escuelas, cumpliendo todos los criterios sanitarios”. No obstante, insistió en que el retorno debe ser voluntario y que se deben considerar “experiencias heterogéneas”, dada la incertidumbre sanitaria en el país.
“Hay que ir abriendo camino en esta situación tan complicada. Debemos hacer todo el esfuerzo para no comprometer el aprendizaje de los estudiantes que están en la etapa escolar. No puede volver a ocurrir lo del año pasado. De alguna manera, los y las estudiantes tienen que volver a estudiar de manera presencial, porque esta modalidad es indispensable e irreemplazable”, indicó.
El experto en política pública educacional y académico del Departamento de Educación de la Usach, Jaime Retamal, calificó la reapertura de colegios como un proceso “desafiante”, pero concordó con Ríos en que estar presente físicamente “es necesario en el acto pedagógico y educativo”. A su juicio, el proceso de virtualización comprobó “la importancia de estar frente a frente”.
“Lo importante en la escuela nunca ha sido asistir o estar presente, sino el comprender a los otros compañeros, a los profesores y a los aprendizajes. Las modalidades de virtualización de las relaciones humanas no conducen a ninguna parte. La presencia cara a cara es irremplazable y si nos equivocamos al menospreciarla, aún estamos a tiempo de remediarlo. Debemos recomenzar y estar dispuestos a enmendar los caminos perdidos en el ámbito escolar”, manifestó.
El académico destacó los esfuerzos de distintos actores educativos para encontrar las maneras de hacerse presentes, a pesar de que las debilidades que dejó el año pasado serían “enormes”, pero subrayó que “la virtualidad no aportaría un sentido profundo a la educación secundaria”.
Apertura responsable, necesaria y segura
Para el infectólogo y académico de la Facultad de Ciencias Médicas de la U. de Santiago, Ignacio Silva, hay distintas variables que influyen en la vuelta a clases de colegios y liceos, donde lo importante es “no apresurarse” y analizar caso a caso, teniendo en cuenta a los niños y niñas que viven con adultos mayores y enfermos crónicos.
“La OMS ha sido bastante categórica al recomendar de manera global el reinicio de las clases lo antes posible, pero, por supuesto, de manera responsable y segura. Es importante cumplir con las medidas básicas de protección, sobre todo, respetando los aforos o adecuando la educación escolar para respetar la distancia física”, expresó el facultativo.
Silva consideró que situaciones como el cierre de dos colegios en la Región Metropolitana, al detectarse casos de Coronavirus, eran “esperables”. “Lo más probable es que siga sucediendo en cualquier otra institución”, sostuvo. Sin embargo, a su juicio, ello no significaría un fracaso en el retorno a clases.
“Lo importante es estar evaluando qué tan frecuente es esto; cuál es la magnitud de estos casos; cuáles son los protocolos prestablecidos en cada uno de los establecimientos, para actuar ante esta situación; y que se realice esta actividad de la mejor manera posible, asegurando, también, una educación de calidad para los escolares”, concluyó.
Fuente: USACH