- Durante el conversatorio se reseñaron los desafíos del proyecto Casa Alma, que busca transformar la trayectoria de vida de niños, niñas y adolescentes (NNA).
Con el objetivo de compartir conocimientos y primeras experiencias del nuevo modelo de intervención en residencias, denominado “Casa Alma” -en su etapa piloto-, María Ayuda invitó a un conversatorio a los Organismos Colaboradores de Mejor Niñez para dar cuenta de los avances, desafíos y dificultades que ha enfrentado el proyecto y que inciden directamente en la calidad de vida de niños, niñas y adolescentes (NNA).
Entre las entidades que asistieron al encuentro estuvieron Aldeas Infantiles SOS Chile, Coanil, Hogar de Cristo, Protectora de la Infancia, Fundación Creches, Fundación Cardenal José María Caro, Guadalupe Acoge, Juntos por la Infancia, Fundación Huella, Padre Semería, Ciudad del Niño y Corporación Crecer Mejor. El encargado de abrir la jornada fue el Director Ejecutivo de María Ayuda, Ignacio Concha, quien señaló que el piloto “Casa Alma” tiene entre sus desafíos proporcionar cuidado y atención centrado en cada NNA, cuyas edades fluctúan entre 6 y 12 años, teniendo en cuenta sus necesidades físicas, emocionales y sociales. “La idea inicial surgió el año 2018 en el marco de un ajuste estratégico institucional, en el que el Directorio de la Corporación María Ayuda decidió preguntarse: ‘¿Cómo podemos ofrecer un cuidado de calidad, siendo a la vez sensibles al desarrollo de los NNA que ingresan a la corporación?’”, añadió.
Tras hacerse estas interrogantes, a principios de 2021 María Ayuda convocó a un equipo de especialistas en Neurociencia, Psiquiatría Infantil, Trauma Sensible al Desarrollo, Investigación Social Aplicada, Gestión de Calidad, Intervención Social y Enfoque de Derechos con la idea de “implementar un modelo de atención residencial que agrega valor al servicio de cuidado y protección que la Corporación ha ejecutado en Chile durante 40 años”, afirmó Ignacio Concha, quien agregó, además, que los principales hitos del programa han sido el Primer Intento Estratégico (2018), el Diagnóstico (2020-2021), Diseño del Modelo (2021-2022) Planificación de Implementación (2022) y Pilotaje (2023).
La directora del proyecto “Casa Alma”, Ximena Calcagni, se refirió a los principios fundacionales y operativos del modelo que tienen que ver con generar un espacio de amor, dignidad y comunidad. “La protección de los derechos de los niños, niñas y adolescentes, la gestión y mejora continua basada en el aprendizaje, la calidad e innovación y, lo más importante, el cuidado terapéutico genera un vínculo, neurodesarrollo y resilencia”, añadió.
En ese sentido, además, aseguró que el estándar de infraestructura es clave y su objetivo es el desarrollo integral de niños y niñas entre 6 y 12 años, basado en garantizar un espacio seguro para el desarrollo físico y emocional, fortaleciendo espacios de vida familiar para el trabajo de vinculación y reunificación; privilegiar espacios para el trabajo profesional y técnico para garantizar una gestión centrada en la calidad, generar espacios idóneos para el juego, la educación en el amor, los valores y el respeto a la dignidad humana y diseñar un entorno adecuado para la restauración del vínculo con los demás, para la resignificación del trauma y la reinserción social.
Para finalizar, durante la presentación se entregaron algunas recomendaciones:
– El programa de protección residencial debe estar inserto en barrios donde predomine un uso residencial consolidado.
– Debe ser medioambientalmente adecuado y alejado de focos inseguros e insalubres.
– Con una Red comunitaria segura y protectora con la cual relacionarse y que permita la integración de los NNA.
– Cercana a la red de servicios y equipamientos públicos de la ciudad.
– Contar con el mayor grado de conectividad y accesibilidad posible.
– Favorecer el encuentro periódico de las familias y/o adultos referentes de NNA.
Fuente: Vital Comunicaciones